Para aprender se pasa por una oscuridad, es esa sensación de no conocer lo que da inseguridad.
Se disipa cuando llega el saber, nos instruimos de muchas formas en especial de las sombras.
La sombra te hace sentir honrado y feliz cuando una luz que se enciende te ha iluminado, como esos hechos “casuales” que ocurren para tu bienestar o ese libro que despierta tu intelectualidad o esa hipótesis que le habla a tu curiosidad.
A las oscuridades algunos las llaman “proceso” y el diccionario nos cuenta que su definición (la de proceso) es siempre ir hacia adelante, se entiende que luego de trabajar en tinieblas, serás más capaz de asomarte a la claridad con felicidad o de potenciar tu tenacidad.
La vida suele ser una escuela nocturna, donde aprendes a encender cirios o velas para alumbrar tu propio camino, donde habrán personas que apagaran tu albor y otras que encenderán cientos a tu alrededor para que continúes iluminando e iluminada…lo que siempre importa es no detenerse y a nadie parecerse.
Salir de las sombras debe ser un acto cotidiano, pues ellas vienen y van, lo importante es tener claro que no hay que oscurecer a nadie para brillar, que tu propia luz nunca dejes apagar, que las clases que tomas en esta academia son siempre para mejorar , evolucionar y que unos de los mejores aprendizajes es irradiar .

Agradecida a mi hermana de la vida @solperez a quien aplaudo por su logro, también a nuestra casa @venezolanos por estar a su lado para poder alcanzar el numero 100…vamos por cien mas
Invito a: @gemamedina