Yacimientos arqueológicos y paleontológicos del archipiélago Los Roques
|CIUDAD/CENTRO POBLADO| Archipiélago de Los Roques
|ADSCRIPCIÓN| Pública
|ADMINISTRADOR/CUSTODIO O RESPONSABLE| Autoridad Única de Los Roques
Son abundantes los rastros arqueológicos en todo el archipiélago Los Roques, ya se trate de restos orgánicos de
animales o humanos, ya de las producciones culturales de estos últimos. Hasta 1990 se habían realizado excavaciones
en treinta y seis islas, de las cuales en diecinueve se consiguieron yacimientos de importancia, destacando sobre todos ellos los de Dos Mosquises norte y sur, el cual se comenzó a explorar en 1982.
En cuanto al patrimonio paleontológico existente en Los Roques, se han encontrado restos orgánicos de animales sacrificados por motivos alimenticios, tales como tortugas, botutos y diferentes especies de peces.
Entre los yacimientos arqueológicos que implican una presencia humana en el archipiélago, los más antiguos
son aquellos de época prehispánica, y dentro de estos, los de más antigua data son los concheros de botutos,
restos dejados en las playas de Los Roques posiblemente dos o tres mil años antes de la época presente por hombres
arcaicos que desconocían la agricultura y la alfarería y que pueden haber llegado a las islas para la explotación
de los mariscos. Hacia 1000 después de Cristo llegaron al archipiélago los primeros portadores de cerámicas provenientes de las costas venezolanas entre Boca Tacagua y Ocumare de la Costa —conocidos como ocumaroides—,
a quienes se debe la presencia de piezas cerámicas pintadas en su mayoría con líneas paralelas y triángulos rojos
sobre superficie blanca, así como ollas y cuencos sin decoración, budares, herramientas de piedra, instrumentos de pesca, adornos personales y figurillas humanas —representaciones a pequeña escala de hombres y mujeres de
pie—. La importancia de los yacimientos de Dos Mosquises norte se debe a que los ocumaroides se asentaron en
esta isla y conformaron el único núcleo ocumaroide en todo el territorio insular venezolano. Hacia 1300 llegaron a Los Roques hombres exponentes de la cerámica conocida como valencioide —provenientes de la costa venezolana y
de la cuenca del lago de Valencia—, quienes se instalaron en Dos Mosquises sur, dejando restos de instrumentos musicales diversos y gran cantidad de figurillas humanas, de hecho, gran parte de los restos arqueológicos existentes en
esta isla son de origen valencioide. En esta isla se han hallado también restos óseos humanos, el único hallazgo arqueológico en su tipo que se ha hecho en las dependencias federales del país.
En cuanto a los yacimientos que datan de la época del descubrimiento y la Colonia, las piezas existentes de este período son tardías, puesto que no fue sino hasta 1589 cuando se efectuó la toma de posesión oficial del archipiélago
por parte de la provincia de Venezuela y bajo orden del gobernador don Diego de Osorio. Sin embargo, esta posesión no hizo efectiva su población, y los islotes fueron albergue esporádico de piratas y pescadores hasta que a finales del siglo XVIII y principios del XIX se inició la explotación de las salinas de Cayo Sal. De esta época, pues, datan restos de diques construidos con piedras de coral, cimientos de casas elaboradas con el mismo material y grandes terrenos donde se depositan desechos alimenticios, fragmentos de lozas españolas, cubertería, calderos y herramientas, pertenecientes posiblemente a la antigua aduana y a los trabajadores de las salinas. Del siglo XIX datan algunos de los restos arqueológicos de mayor interés en el archipiélago, los hornos de cal y los vestigios de la explotación de carbón.