Toda la vida como bestia.
Amaneció con gritos inusuales
Y luego estas heridas se llenaron de tequila al amanecer.
¿No te arrepientes de los últimos años?
En lo profundo de su corazón
Entonces entiendes.
Eres como en la cárcel
El alma duele tanto
En un cuarto tapado, encerrado.
Sufro con lujuria
Quien trajo a casa la acacia calcedonia
Ojo de la cerradura en el alma de las heridas.
Buruiana.
Pero que no soy dios soy un robot, tu robot.