Querido futuro esposo

in #cervantes7 years ago

Querido futuro esposo,

Donde quiera que estés, allá en el otro lado del mundo, a miles de millas de aquí, o quizás a unas cuadras, quiero que sepas que muero por verte pronto. No escribo esto con la intención de que lo leas ahora a mis dieciséis cuando apenas sé lo que es besar, o en veinte años cuando esté preparando el desayuno de los niños y tú en el ordenador bebiendo café. En realidad no he pensado un momento especial para que lo leas, solo quiero que lo hagas. Quiero que sepas que eres el hombre más maravilloso del mundo, me gusta tu sonrisa y esas cosas raras que haces cuando te ríes a carcajadas; y quizás no te lo he dicho pero, creo que cocinas exquisito, incluso mejor que yo. Y justo ahora debes estar poniendo esas cejas pícaras que pones cuando tienes razón en algo (¡No te rías!). También quiero decirte que al igual que tú, a veces tengo miedo y también dudo, pero al final de todo, sé que valdrá la pena, porque tú y yo estamos destinados a ser, y fuimos, y seremos.

No pretendo que finjas, sé que te gustan las flacas con buenas nalgas pero, debes entenderme también, ¡me gusta mucho la comida! Aunque, te prometo que haré ejercicio y comeré sano desde ahora. A mí en verdad no me importa demasiado si estás gordito o flaquito, solo quiero que te ames porque como te dije ¡eres el hombre más maravilloso del mundo! ¿Y cómo es que estoy tan segura de esto si ni siquiera hemos hablado? No lo sé. Es decir, lo sé pero no lo sé. Solo puedo decirte que imaginarte y soñarte se siente tan real, como si ya te conociera, como si nuestro amor naciese de Dios y trascendiera las dimensiones.

Deberás tenerme paciencia porque puede que no vaya al mismo ritmo que tú; sabes que soy menos experimentada, entonces, tomémonos nuestro tiempo que tenemos toda la vida para amarnos. Eso sí, quiero que me beses como si no hubiese un mañana y me lleves a bailar lento para estar entre tus brazos y sentirme en el lugar más seguro del mundo. No quiero que me des flores, a menos que sean margaritas, en ese caso sí, las amo locamente. Viajemos por todo el mundo y llévame a conocer la nieve. No hace falta ir a sitios tan lujosos, solo a la orilla de la playa quizás, de noche, con una botella de champán a contemplar el cielo nocturno y sus diminutas estrellas que han estado allí desde siempre. Las mismas que los egipcios seguían, que no se han creado ni destruido, sino que se han transformado, así como tú y yo.

Quiero hablar contigo por horas sobre el cosmos y lo que hay allá afuera, de adónde vamos, la buena música y los viajes en el tiempo. Quiero que nos enamoremos a cada segundo así como nuestras células se reproducen. Quiero ser tu pilar y que me cuides en las noches frías, cuando tenga pesadillas, acurrucarnos (¡y más te vale no roncar!) o quedarnos despiertos solo pensando en voz alta. Quiero acompañarte en cada momento de tu vida, en tus logros, en tus fracasos, y si alguna vez te sientes inseguro, puedes contármelo. Quiero que tengamos una habitación en el ático (cosas mías de niña) y una biblioteca enorme; entenderé si aún para ese entonces te gustan los videojuegos, el fútbol, o los autos deportivos; sé que ellos son tu primer amor.

Sé que habrá chistes sobre mis gustos raros en la música, que tendré que ponerme de puntillas para ponerte la corbata, que encajaré perfecto en tu pecho, que no te dejaré quitarte la barba y que yo querré ponerle Galatea a nuestra primera hija y tú Sofía. Sé que le contarás historias al dormir y que serás su cómplice para cosas que me harán enloquecer, como darle un chocolate a las diez de la noche. Sé que voltearás a ver a otras chicas "disimuladamente", entiendo que es parte de tu naturaleza. Sé que habrá disyuntivas, discusiones y objeciones, pero vamos, que todo eso también es parte del equilibrio. Sé que ambos seremos exitosos porque soñamos en grande. Sé que nunca nos cansaremos porque, nuestros átomos están tan atraídos que no piensan parar de orbitar hasta que pasemos a la otra vida.

Querido futuro esposo, quiero que sepas que desde siempre te he amado, desde el origen de los tiempos, desde mi origen, desde el tuyo; y te seguiré amando incluso cuando despertemos en la mañana y tengamos una arruga más; yo tendré el cabello de plata y tú capaz ni tengas. Envejecer contigo será todo un placer, porque siempre sabrás hacerme reír con tus ocurrencias, y siempre, me harás saber lo que es el amor.

Pinterest
Pinterest

Querido futuro esposo, no leas esto con lágrimas en los ojos, solo, gracias por escogerme, porque yo también te escogí.

Te ama desde la eternidad,

Tu futura esposa.