En realidad este ensayo no se trata en si de desmitificar o realzar la personalidad del "libertador" de América, eso será materia para otra publicación. Desde la pluma de un médico psiquiatra venezolano, Simón Bolívar se le puede describir mas humano, mas vulnerable, menos helénico.

Cabe destacar en la obra de Herrera Luque, además de señalar los personajes de la gesta independentista que se convirtieron en los antiheroes de todas estas cruzadas patriotas y realistas, en su última obra "El vuelo del alcatráz", el caraqueño criado por un padre que también fue médico psiquiatra y del que también aprendió a contar historias desde ese lado psicológico de las personas que muy poco se muestra en una película o cualquier historia escrita, se dedicó a mostrar a Bolívar lleno de encrucijadas.

Existe una forma de mirar a Bolívar como un ser humano con defectos, debilidades, acorralado, perplejo y dubitativo, en medio de esta campaña titánica que se propuso después de alzar su voz y haber jurado que liberaría a la América entera de la opresión colonial española. Herrera Luque escribe este ensayo, siempre desde la ficción, suponiendo claro está, desde la psiquis de un hombre apesadumbrado quizás en esos momentos de impotencia que debieron existir, el cuento lo hace mas interesante cuando dándolo todo por perdido, hace aparecer su encuentro y amistad con José Antonio Páez, para recomponer la historia y terminar de completar lo jurado en monte Sacro.

Sin duda alguna, para aquellos que no nos quedamos solo con las glorias, sino además esperamos mirar el alma de aquellos desmitificados para hacerlos mas creible, Herrera Luque nos regala esa posibilidad de mirar a un Bolívar de carne y hueso.