Una ciudad radial histórica, los 500 años de Cumaná.
Una de mis pasiones es la radio, creo que es un medio transformador; capaz de mover fibras. Desde que me inicié en los medios radiofónicos, todo fue cambio tras cambio. Algunos mucho más intensos y complejos que otros, pero todos de suma importancia para mi crecimiento profesional y humano.
El hecho de haberme iniciado en la radio con un programa infantil en el año 2010 fue una dura prueba, este tipo de radio es bien delicada por que tratamos con niños; aun así considero que hicimos un gran esfuerzo y el proyecto gustó. Desde luego el éxito de un programa no sólo lo mide la audiencia, en realidad la estación juega un papel importante en todo esto; es fundamental una buena dirección; un equipo de trabajo y esto es necesario que sea entendido. Una estación de radio es un medio de comunicación y por lo tanto es crucial que entienda su papel en el desarrollo de una nación. Tal vez por eso me gustó mucho trabajar en Musical 100.3 Fm, había un equipo; y desde luego dirección que evidentemente se transformaba en hechos y proyectos interesantes; creativos y útiles para esa sociedad que sintonizaba el dial.
Yo en el centro con parte del equipo.
En el 2015 cuando la ciudad de Cumaná estaba por cumplir los 500 de su fundación tuve la oportunidad de ser parte de un proyecto radial y mucha importancia; era un regalo para la ciudad. El director de ese entonces de Musical 100.3Fm era el Licenciado Guillermo García Campos, alguien a quien considero una referencia radial y cultural. Y como es un apasionado de la ciudad decidió crear un proyecto llamado #500HorasPorCumaná, consistía en transmitir de manera ininterrumpida durante 5 días; para eso necesitaban locutores que lo hicieran posible y se sumaron al reto Laura Guerra, Alejandra Fernández, Ramón Gorrín, Luis Salazar y Roberto Toubia. Quienes bajo vigilancia médica, defensa civil, bomberos y otros especialistas en distintas áreas para que los locutores se embarcarán en el reto por la ciudad.
Roberto, Alejandra, Luis, Laura y Ramón en pleno reto.
Fue una tarea compleja, difícil. Pero gracias a un equipo acoplado, bien dirigido y compenetrado se logró el cometido. Fueron 5 días de mucho trabajo, supervisar que los locutores estuvieran bien alimentados, bañados, despiertos durante 5 días no era tarea sencilla; así que nos turnamos algunos compañeros y yo. En realidad, mi papel era llevar las redes sociales; sobre todo Instagram, además de mantenerlos animados y despiertos durante la noche; así que no podía dormir.
Debía publicar posts de ellos transmitiendo en la madrugada, hablando con los invitados; porque los 5 días y durante las 24 horas del día se recibieron visitas de distintas personalidades de la ciudad; artistas, deportistas, autoridades universitarias y visitantes que querían saludar a los locutores. Y durante esos días nos mantuvimos en pie junto a ellos y la ciudad entera, hubo maratones, paseo en bicicleta y bailes en apoyo al reto; fue una experiencia muy enriquecedora.
La cantante Rita Figueroa y su grupo de visita al reto.
El paseo en bicicleta en apoyo a los locutores.
Bailes en honor a locutores.
Cinco días llenos de alegría, música, fotografías y muchas muestras de afecto; de esas que marcan una vida porque sabes que fuiste parte de esa historia; de ese regalo a una ciudad que merece más. Que puede dar más a un país que nos ha dado todo, porque eso ha hecho Venezuela.
En cabina antes de cantar cumpleaños a Cumaná.
La ciudad cantó cumpleaños con los locutores.
Sin duda valió la pena cada día de trasnocho, estoy seguro que nadie se arrepintió de participar en este reto en honor a Cumaná; una ciudad con todo el potencial para crecer. Espero verla brillar nuevamente...
Locutores listos para cantarle a la ciudad.
En realidad querida red, tengo muchas más fotografía del reto de las #500HorasPorCumaná; también vídeos pero es difícil subirlas todas. Sólo agradezco haber sido parte de ese regalo a Cumaná, fue un placer.
Las fotos las tomé yo con mi Moto G1, el diseño no recuerdo quien lo realizó; me disculpo por eso.
Gracias por leer, nos vemos en otro post.