Una carta de un corazón roto

Ok, a ti también te debo unas disculpas, te debo disculpas por fallarte, por mentirte, por lastimarte. No sabes cuánto me pesa que todo haya acabado así, tan drástico, tan trágico, tan injusto para ambos. No tengo excusa alguna, no puedo escudarme ni defenderme con nada, lo hice, lo acepto. Al principio culpé a todos, a tus amigos, a los míos, mi familia, la tuya, el colegio, a ti, pero nunca tuve la intención de verme y evaluarme, y lo hice, entendí que, aunque todo fue a “escondidas” tarde o temprano lo sabrías y te lastimaría. Me duele haberte fallado. Me quedo de todo esto con el amor propio que tienes y como honras tus compromisos, recuerdo que alguna vez de esas tan atesoradas conversaciones que teníamos me dijiste que algo así no lo perdonarías y míranos, acá estamos.

No sé si te sucede, pero no puedo hacer ni una sola cosa sin pensarte, todo me recuerda a ti, es como si cada cosa que toco lleva tu nombre y cada cosa que hago tu recuerdo. Ahora recuerdo perfectamente todo lo que hacíamos juntos, recuerdo desde nuestro primer beso, hasta el último, las salidas, conversaciones, fotos, cosas estúpidas que hice porque te amaba y estaba perdidamente enamorado de ti y que duro es no tenerte y seguir sintiendo todo eso por ti, recuero todo exactamente como pasó y créeme que, si bien atesoro todas esas memorias, me lastiman cuando suben a mi mente y caigo en conciencia de como terminaron las cosas. He intentado borrarte, arrancarte, eliminarte, quemar todo lo que me recuerda a ti, con otras personas, solo y hasta en silencio, y se me hace imposible hacerlo. Cuando logró no pensarte, tanto, no me escapo de soñarte mientras duermo, como lo hacíamos antes, como solía hacerlo yo.

Estoy acá no solo para pedir perdón, también estoy para intentar “remediar” las cosas, no sabes cuánto me hubiese encantado hacerlo en persona, pero no te juzgo, actúas de una manera muy prudente.

Créeme que muy mal la estoy pasando sin ti, cuando busco alguien en quien confiar mis iras, mis penas, mis logros y mis vivencias y no estas, ninguna se parece a ti. No estoy cerrándome a la posibilidad de estar con alguien más, porque al final de todo si nada de esto funciona me tocará resignarme, como lo estuve hace tiempo, pero al saber y entender que el que falló fui yo me da un ligero aire de esperanzas, esperanza en poder solucionarlo, porque es totalmente mi responsabilidad.

Suena a labia, a mentiras y está bien que lo pienses así, te he dado motivos, pero no lo es. No lo es porque este ha sido mi día a día, mi monologo antes de dormirme. No sabes cuánto he deseado tener un mensaje tuyo de nuevo en mi celular, o una llamada de tu teléfono fijo, un beso o una mordida tuya, cosas que no valoré, porque simplemente te fallé, hice de todo eso mofas y ahorita me hacen tantísima falta.

Me sentía grande, poderoso, indestructible, estando contigo, tal vez eso me impulso a hacer las cosas que hice porque juraba que siempre estarías para mí, pero hoy no es así. Es difícil confiar en estas palabras, total, fui una mala persona contigo y lo acepto porque quien ama no lastima, sin embargo, quienes somos para juzgar lo que siente el otro.

No dejo de pensarte, no te olvido, no olvido lo que siento por ti. Extraño demasiadas cosas y tal vez por eso es que me va así ahorita.

Ya creo que no queda nada más por decir, en general ahí está muy resumido lo que quería platicar contigo cara a cara, pero entiendo que no quieras. Recuerda que no dejo de sentir por ti todo lo que hace tiempo nos dijimos, nunca lo dejé de hacer, pero entenderé si ya tu no sientes nada por mí, solo necesito hablar contigo y sacarme esta maldita duda, esta intriga, perdonarme a mí mismo por fallarle a la persona que sacó lo mejor de mí, que fue incondicional y que hoy no está a mi lado y si nos quedase una oportunidad, volverlo a intentar. Suena cliché, pero debemos llevarnos golpes en la vida para aprender, ya yo me lo llevé, el más grande que he tenido en realidad y no deseo por nada del mundo volver a estar así. No quiero buscar en nadie más lo que tengo, o tenía contigo, te fallé y me fallé a mí mismo, me valieron mierda tantas cosas que hice por ti, que hicimos por nosotros. Qué más lección puedo tener.

Solo perdóname y conversemos, no sé si es mi ego, pero sí en realidad nos amamos como dijimos creo que podemos hacer muchas cosas de nuevo, creo en el empezar de cero, creo en muchas cosas y sería capaz de hacer cada una de ellas por volver a estar contigo, porque no sabes que jodido se siente todo esto. Y no es soledad, ni nada de esas cosas, es extrañar el único sitio donde me sentía propio, me sentía querido. Es saber y estar consciente del daño que te hice y dejar a un lado todo, solo por remediarlo, no me siento solo eso no, simplemente te extraño, extraño a la persona que daba todo por mí y no valoré, al fin y al cabo, te fallé y no quiero seguir así.

Eso es todo.

Espero algún día me leas.