6 Trampas de la conciencia que las personas inteligentes saben evitar y sus salidas.

in #cervantes7 years ago

¿Sabes por qué la infancia nos parece una época feliz? ¿Y por qué nos sorprendemos cuando calculamos los años que han pasado desde la graduación? Es por nuestra astuta mente que a veces cambia la realidad. Caemos en la trampa de la conciencia que nos presenta un mundo distinto a cómo es en realidad. Pero hay una forma de evitar este tipo de trampas.

1- Desviación hacia lo entero

A nuestro cerebro no le gustan las cosas incompletas ni los objetos fraccionados. Y lo que sufre a causa de esto es, por ejemplo, nuestra figura. El cerebro percibe cualquier porción de comida como algo entero, incluso si es demasiado grande para comer de una sola vez. Tanto una pequeña lata de refresco como una botella que es dos veces más grande, representan para el cerebro una porción, lo que significa que inconscientemente queremos beberla entera. Debido a este efecto ahora, cuando ya no hay escasez de productos, sigue sonando la frase que es tan familiar para muchos: “¡Termina la comida, no podemos tirarla!”.

Salida: Al empezar a hacer cualquier cosa, hay que determinar qué objetivos queremos lograr con ella. Y hay que decir “basta” no cuando el plato esté vacío, sino cuando ya no sientes hambre.

2- La regla peak-end

¿Qué elegirías: soportar 1 minuto de dolor o 1 minuto de dolor, y luego otros 30 segundos de malestar? El sentido común sugiere elegir la primera opción, pero en realidad las personas se sentirían mejor si eligieran la segunda. Los experimentos han demostrado que esos 30 últimos segundos pueden eclipsar la memoria del dolor. Este es un claro ejemplo de la regla peak-end. No evaluamos los eventos como un todo, sino por su culminación y final. Una película interesante parecerá aburrida porque la escena previa a los créditos no es buena, y el colega molesto se volverá más atractivo si te elogia al final del día.

Salida: esta regla nos recuerda cuán importante es finalizar todo lo que hagamos en una nota positiva.

3. Retrospección rosa

La niñez nos parece una época despreocupada y se recuerda con una sonrisa, aunque en realidad, en la infancia podíamos haber sentir aún más estrés que ahora. Esto se debe a que nuestro cerebro tiende a concentrarse en los recuerdos positivos. Y no se trata solo de nostalgia. Un mal viaje de vacaciones te parecerá más agradable después de un tiempo, porque las pequeñas cosas molestas se habrán borrado de tu memoria.

Salida: no es tan malo ver los eventos importantes para nosotros a través de lentes de color rosa, pero es importante no olvidarnos de este pequeño truco de nuestra mente. Los recuerdos más felices generalmente no son del todo confiables.

4-El efecto Streisand

¿Recuerdas la frase “No pienses en un elefante blanco”? El intento de alejar un pensamiento de la imaginación solo hace que se vuelva más presente. Fue así como en el año 2003, Barbra Streisand trató de eliminar del acceso público esta foto de su casa, que se había filtrado en la red. Como resultado, la imagen se replicó tanto que se le dio el nombre de “Streisand” al efecto psicológico por el que tendemos a interesarnos más por aquello que está prohibido. El efecto se extiende no solo a la información en la red, sino también, por ejemplo, a las tortas que parecen más apetecibles cuando estás a dieta.

Salida: si pensar en un elefante blanco está permitido, dejas de hacerlo. La aceptación de los pensamientos y una elección consciente son más efectivas que las prohibiciones.

5. El síndrome del impostor

Con este síndrome, las personas, habiendo alcanzado el éxito, se consideran unos estafadores. Les parece que llegaron al éxito por accidente, sin merecerlo, por error o porque las personas a su alrededor no tuvieron tiempo de descubrir que no se lo merecían. Y, en lugar de disfrutar sus los logros y seguir avanzando, experimentan ansiedad y se detienen en la etapa que ya ha pasado. Muchas personas públicas, incluidas las estrellas, sufren el síndrome del impostor, por ejemplo, Emma Watson.

Salida: si la sensación de no merecer los beneficios obtenidos te es familiar, puedes hacer una lista de 30 cosas de las que estás orgulloso. La lista te recordará el camino recorrido y te ayudará a darte cuenta de tu propio valor.

#6- Para finiquitar: El efecto IKEA #

Tendemos a sobreestimar el valor de las cosas que hemos hecho con nuestras manos, independientemente de su calidad. Un experimento demostró que las personas que armaban con sus propias manos un armario de IKEA estimaban que su costo era más alto que el de los sujetos a quienes se les pidió adivinar el costo del mismo gabinete, pero ya ensamblado. Y no se trata solo del esfuerzo. Recuerda la desviación hacia lo completo: el armario ensamblado te da una agradable sensación de completitud, que nubla un poco la mente. Esta es una de las razones de los altos precios de las cosas hechas a mano.

Salida: es importante y necesario apreciar las cosas hechas por tus propias manos, pero hay que, recordar que, para otras personas, el valor de un objeto puede ser inferior que para su creador, y es totalmente normal.

Espero les haya gustado. Muchas gracias. Con su apoyo continuare publicando sobre mucho mas.