Un día con la Scuderia Ferrari
No sé como empezar a explicaros todo lo que he vivido, sentido y sobre todo disfrutado junto a la Scuderia Ferrari.
Todo comenzó quedando segunda en un concurso de ideas organizado por el Banco Santander llamado Driving Innovation, pero la chica que ganó por lo que sea pues no quiso el premio y entonces pasó a mí.
EL PREMIO ERA PASAR UN DÍA CON LA SCUDERIA FERRARI EN LOS PRETEST
Comienza todo con un hotel genial en el centro de Barcelona y con un servicio maravilloso de no se que empresa pero nos llevaron en unos Mercedes clase S que alucinaba la gente cuando bajábamos de el y se nos quedaban mirando como diciendo, ¿estos dos quieres serán?
Nos viene a buscar Jorge y comienza uno de los mejores días de mi vida. Después de tener a mis dos hijos, claro.
Entramos al motorhome y nuestra impresión fue, ¡Madre mía no me creo que esté aquí!
Se nos debió de quedar una cara de tontos...
Me pusieron a trabajar como una más de la Scuderia Ferrari, pero aún no reaccionaba yo porque no me creía del todo donde estaba.
Aún ahora que estoy en casa escribiendo esto y volviendo a vivir con vosotros estos momentos todavía no me creo que me haya podido pasar a mí algo así.
Luego hicimos muchas más cosas, entre ellas entrar al taller, cosa que no puede hacer nadie, recorrer el circuito en un mini-bus, tomar algo en los pisos box, ver los test desde las mejores gradas, entrar y salir a nuestras anchas de todo el recinto ferrari. ¡Vamos una pasada!
Ahora os voy a contar un secreto, yo esto de los coches pues como que nunca me ha ido mucho la verdad, pero he salido de aquí toda una fanática del motor y si me preguntáis hasta os puedo sorprender.
Momentos únicos que nunca se olvidan y que gracias a personas maravillosas se pueden hacer realidad.
Pudimos conocer a Kimi Räikkönen y me lleve mi chaquetón firmado por él, por Vettel y por Maurizio Arrivabene que es el director del equipo.
Podéis entrar aquí y ver las más de doscientas fotos que hicimos.
¡Gracias a Emilia, Marta y Jorge!
Me dio mucha pena despedirme de ellos pero por otra parte una alegría inmensa por haber tenido la oportunidad de conocerlos.