Primeras Decepciones.
No hay nada más triste que esperar algo que nunca pasara...
De pequeño todos teníamos la esperanza de que nos llegara ese típico regalo en navidad, pero no solo ese típico regalo sino ese gran regalo que queríamos desde hace un tiempo. Existen esos niños afortunados a los cuales esa ilusión les perduro hasta una edad ya avanzada, también está la otra parte que al principio le llegaba algo similar a lo que había pedido, pero esta esa gran parte de niños sin un final feliz, a los que el mundo no les regala ni una sonrisa.
Recuerdo que las primeras decepciones son el típico "lo siento, será para la próxima" que te dicen cuando ibas a salir a un sitio y llueve y esas son inevitables
Igual las decepciones nos rodean y no importa si tienes 5 o 50 años, ellas siempre estarán esperando dentro de los anhelos de las personas.
El mundo está lleno de decepciones y uno como ser humano tiene que tener la capacidad de preverlas o simplemente poder superarlas con una sonrisa en el rostro.
Mi forma de pensar está un poco distorsionada por las circunstancias por las que he pasado y no sé si estará bien o mal pensar como yo, pero a mí me funciona bastante bien desde que empleo este método “anti-decepciones” y aquí como consejo se los dejo si gustan:
Siempre esperen lo peor pero sin deprimirse, sino que disfrutan del momento teniendo en mente que es lo peor que pueda pasar, y si de por casualidad pasa algo malo ya estaban preparados psicológicamente pero si no pasa nada y todo ocurre perfectamente es mejor, porque llega como de sorpresa.
Esta técnica la desarrolle con el afán de dejar de decepcionarme, pero en búsqueda de una solución sin decepciones solo me di cuenta de que eso era imposible así que preferí hacerme la idea de lo peor y dejárselo al destino.
Nunca abandones tus sueños y lucha por ellos, no importa cuántos obstáculos te encuentres en el camino.