EL DESEO, LA SUPERACION Y LAS CONDICIONES...

Estela Dominga…

Para quienes no la conocen les voy a hablar de una persona quizás como muchas, pero este en particular lo viví personalmente, Estela Dominga, es una gran amiga y que ahora solo la contacto por redes sociales si acaso, porque ya no está en nuestro país, pero me alegra mucho cada vez que me escribe, por cierto le mande este articulo antes de publicarlo y me dijo: siempre tu mi loco, gracias por esto…

No muchos la conocíamos en el instituto, y luego después de varios meses de amistad, pude conocer la historia de aquella muchacha apureña que hoy dia, es una importante representante de ventas en una transnacional y viaja de México a Miami constantemente y para Venezuela de vez en cuando, solo a ver su a abuela.

Estela Dominga llego al instituto como cualquier estudiante, inicio de carrera, bueno a ponerle corazón a la preparación de un futuro, ya saben todos, en realidad yo poco durante el primer año cruce palabras con ella, ya que era muy callada y siempre tenía cara de pocos amigos.

No fue más o menos a mediados del siguiente semestre; que empezamos a conversar por aquellos de los trabajos grupales y que cierto dia, venia en el autobús y al pedir la parada frente al instituto, de casualidad voltee y estaba ella dormida en el asiento donde venía, asi que me tome el abuso y la desperté, sino hubiese pasado de largo.

Fue ahí donde comenzamos realmente a ser amigos, me dio las gracias por no haberla dejado y se sentó a mi lado en clases, ya teníamos algo de confianza y trabajamos juntos ese dia luego los siguientes y de allí empezó una comunicación más continua.

¿Porque estudias electromecánica?

Le pregunte un dia! Es que en realidad este año me cambio de carrera me respondió, la verdad me ayudaron a ingresar porque yo no tenía las posibilidades y bueno importante era entrar me dijo el que me ayudo, ya verás cuando estés dentro, aquí es asi le dije yo también. A partir de ahí que ya conversamos más tuvimos cierta afinidad por lo de la música llanera, visto que alguien le conto que yo era músico y bueno siempre los jueves me decía, Fran mañana es viernes, traes el cuatro y cantamos en la plaza.

Era normal escucharla hablar del estado apure, su gente y su familia, los amigos que quedaron los lugares y que siempre iba a las ferias de Elorza. Todos los músicos amigos que tenía. Compartíamos cervezas, la comida, el pasaje, y cada vez que venía de su tierra me traía queso, maíz, o pescado, cualquier cosa que se pudiera cargar sin problemas, y me decía que pronto iríamos a visitar a su familia.

Nos reuníamos en su casa varios amigos y yo por supuesto, ella se quedaba donde una amiga de su mama de allá de apure que vivía aquí en Maracay, muy amable de verdad la señora como toda la gente de allá, serviciales y atentos, para aquellos tiempos todo era muy económico en nuestro país, hacer una fiesta era muy fácil, y comprar licor más todavía, asi que toda reunión terminábamos envueltos en una fiesta.

Nos pasamos el resto de ese año entre estudios, fiesta, parrandas y clases, los mejores años de cualquier persona, los años de estudiantes. Para el fin de ese semestre Estela Dominga se cambió de carrera volvió a apure durante las vacaciones y nos volvimos a ver el inicio del siguiente año. Me trajo algunas cosas, no solo a mí, a los demás también, pero la note diferente, asi que de momento no le hice mente.

Ya no era la misma, un mes y Regreso más flaca, cara de somnolienta, y totalmente diferente, poco amigable y menos animada, como ya no estábamos en las mismas clases la buscaba de vez en cuando en los cambios de materia o en la salida, esa semana lleve el cuatro pero igual no se animó a ir con nosotros, a los días entre al salón donde ella estaba y vi a un profesor que era también de esos lados de apure, hablando con ella luego lo vi sacar su cartera y darle dinero, ella el verme, escondió los billetes rápido y el profesor me miro pero continuo como si nada, la verdad no quise preguntarle nunca nada, pero no fue la única vez, él siempre la citaba en algún sitio y le daba dinero o comida, le compro un celular y siempre la estaba llamando, de vez en cuando, se separaba de mi para hablar con él, pero yo no quise nunca preguntar nada, si soy su amigo algún dia me contara, es lo que pensaba siempre.

Ese fin de semana volvimos a cantar, beber y pasarla muy bien, recuerdo claramente que me dijo; el domingo vamos al cine y en ese momento le sonó el celular, salió hacia la calle y hablo largo rato no se con quién pero la expresión del rostro me dio a entender que no fue muy grato, en fin de cuentas seguimos tomando pero ya estela no se reía casi, nos despedimos y el domingo no supe nada de ella y bueno la veré en el instituto el lunes, pero el lunes ella no fue a clases, ni el martes ni el miércoles y no respondió su teléfono.

En toda la semana no supimos nada de ella…

Los que la conocían, se preguntaban ¿qué paso? Que cosa más rara, hasta el típico cuanto de la amante de aquel señor sesentón que nos daba clases de matemática 1. Estela se desapareció del instituto y todos los que éramos sus amigos seguíamos extrañados pero nadie tenía contacto con ella, hasta llegue a oír que estela vivía con el profesor y por eso no volvió mas, otros decían que la mujer del profesor la amenazo y por eso ella se fue y bueno pare de contar, lo cierto es que fuimos a la casa donde estela vivía y la señora nos dijo que se habia mudado, que recogió todo y se fue.

Yo la extrañaba mucho porque ya estábamos el grupo acostumbrados a ella, a sus frases criollas y su risa tan elocuente, esa característica tan personal que todo lo convertía en broma pero voluntariosa y aplicada. Asi que tratamos de llamarla muchas veces y no respondía, su teléfono siempre salía ocupado.

De vez en cuando veía a ese profesor que le daba dinero, pero como no le tenía confianza no me anime a preguntarle nada, no fue hasta que un dia, me dio la impresión que ese señor ya sabía que yo lo miraba, y se estableció una atmosfera de hostilidad entre él y yo, supongo, en la experiencia de la edad, él sabía que yo en particular quería decirle algo, solo que no me atrevía porque eso era personal, volteaba de vez en cuando y me veía, hasta que un dia al salir de un salón me lo conseguí en el pasillo y me dijo: hijo vaya al aula 6 y me espera allá que ya voy que necesito hablar contigo.

Me dijo: Estela va a volver solo que para el próximo año….

Yo sé que ustedes son muy amigos, porque ella me la ha dicho, y te agradezco a ti y a todos los que la han ayudado aquí, no pienses nada malo, solo que ella le cambio la situación de repente y bueno tiene pendientes y por eso paro la carrera pero va a regresar. Y por favor no te hagas situaciones conmigo.

Me quede callado por un rato y le pregunte donde estaba? Y enseguida me pregunto; te gusta ella? Le dije que a pesar de que era bella, no lo habia pensado! Solo que sentí Estela es una gran persona y bueno no me cerraba a la posibilidad, que se diera algo entre los dos, él se sonrió y me dijo está bien, tu eres buen muchacho y asi músico caerías muy bien en la familia.

Lo cierto es que me dejo en claro que estela ya tenía otro compromiso muy fuerte, que si la quería ver fuera al mercado principal de la ciudad, pero que cuando la viera no le dijera quien me dijo, que estaba allá.

Ese sábado fui, y ahí estaba en un puesto de verduras, mi amiga, me dejo atónito y confuso, salió corriendo cuando me vio y me dio un abrazo enorme y soltó una risa de felicidad y grito; Mi gran amigo, el mejor, francisco mi loco, al mismo tiempo una mirada junto a una lágrima que no olvidare.

¡Apure con la cola mujer! Le dije y recuerdo su frase bien criolla, con el alma hecha pisillo hermanito, y un tarugo como harina… pero pa lante!

Me sonreí y La verdad no le hice mención de nada, hablamos como 10 minutos y me despedí de ella muy pensativo, empecé a visitarla en el mercado donde estaba trabajando más seguido y nos veíamos constantemente, de pronto me dijo que esa semana se devolvía a su tierra.

Dos años sin saber nada de estela.

Ahí perdí contacto por un tiempo con ella, y bueno bastante tiempo, casi dos años. Y no volví a preguntarle más nada al profesor, no fue hasta un dia ya terminada la carrera y durante los preparativos de la parranda que nos íbamos a mandar todos los compañeros, el profesor me llamo a la oficina de administración, y sorpresa estaba Estela Dominga ahí nuevamente, actualizando sus datos lista para volver a inscribirse.

¡Francisco mi loco Como estas! Con su risa tan característica, salto y me dio el abrazo más grande que jamás me habia dado, asi como pagándome los dos años que me debía de abrazos, me dijo vengo a estudiar otra vez y sentí una gran alegria de verdad, lástima que ya no vamos a graduarnos juntos amiga, le dije con cierta nostalgia, ella me volvió a ver a los ojos y se repitió aquella lagrima, es verdad amigo, falle, pero estoy de vuelta; salimos a buscar a los demás compañeros y se podrán imaginar la gran parranda de ese dia, a desquitarnos todas las rumbas sin estela, pero ahora estaba aquí.

Nos fuimos todos a la casa de uno de los compañeros y armamos aquella fiesta en el estacionamiento, Yo la veía hablar y disfrutar, pero se veía diferente, algo más tosca, cambiada, sus manos daban muestras de trabajo duro, uñas cortas y el cabello nada arreglado, pero feliz nuevamente, en ese instante al voltear hacia la puerta, entro el profesor.

La parte de la historia que no sabíamos.

Salude a aquel profesor, incómodamente estreche su mano, el me dio una palmada en la espalda y me dijo, tráeme una cerveza, bueno fui a buscársela para no ser descortés pero al volver estela estaba abrazada con él, y vi que él le dijo algo al oído y ella lloro, pero seco rápido su cara y volvió a sonreír, ya después de cierto rato y que vi aquel hombre sentado ahí, me le acerque y le pregunte; ¿quién es usted?

Alguien que está dispuesto a ayudarla, me respondió sin mirarme; y eso porque? Le pregunte, porque mi hermano no lo hizo nunca…

Ella es hija de uno de mis hermanos, el abandono a estela recién nacida, ni siquiera le dio el apellido, embarazo a la madre y se desapareció, luego lo veíamos de vez en cuando, pero él no se preocupó nunca por ellos, mi hermano era un sinvergüenza con problemas por todos lados, lo mataron en una gallera en Guárico por una plata que no pago, eso no lo supo nunca estela, sino hasta hace dos años.

Estela volvió a apure a encargarse de su madre que enfermo de cáncer, hacerse cargo de sus dos hermanos y de las tierras que tenía la mama, hijo estela lleva dos años trabajando incansablemente, levantándose a las 3 de la mañana y acostándose a las 10 de la noche, hace queso, siembra, se encarga de los hermanos y las tierras y todavía trabajo en un local comercial porque el dinero se va en la enfermedad de mi cuñada, estela está aquí de nuevo porque su madre murió hace dos meses y ella decidió salir adelante con los hermanitos, vendió lo que tenía en apure aun en contra de la abuela y decidió agarrar el toro por los cuernos.

Aquí esta estela con sus hermanos, lista para empezar de nuevo, dolida pero con nuevas metas, ya compro una casita pequeña en la Coromoto y se estableció ahí.

La fiesta de aquel dia fue fenomenal, aunque estela no se le veía tan feliz, era de suponerse claro recién fallecida su madre, solo recuerdo que cuando no sentamos juntos ella y yo, me dijo al oído; perdóname por no haberte dicho nada y le respondí: está bien corazón de acapro. Como me dijiste? Corazón de acapro exclame riéndome; Y soltó aquella risa que me imagino la desprendió de todos los pesares que llevaba en el pecho. No te entendí de verdad, dijo sin dejar de reírse.

Mi gran amiga apureña Se graduó.

La amistad continua, por el resto de la carrera de estela, claro con menos salidas, ella ahora era madre soltera. Debía atender a sus hermanos que pasaron a ser sus hijos, el mayor para aquel entonces con 14 años y el menor 9, su tío continuo al pendiente de ella tanto como nosotros, trabajaba igual de duro y administro muy bien el dinero que le quedo, ya para finales de la carrera estaba delgada, y algo demacrada pero feliz sentada en la silla del teatro de la ópera en su acto de graduación.

Apure con la cola…. Gritamos cuando recibió el título.

La recibimos todos debajo de la tarima y abrazo a sus hermanos y luego en grupo y de último a mí. Pero quedamos como dos minutos asi juntos y de pronto me dijo: ahora si mi loco me caso contigo jajajaja… no dije nada solo me reí. Celebramos ese dia y quedamos a vernos el siguiente fin de semana, porque yo trabajaba y ella igual, la sorpresa fue que al mes ella consiguió trabajo en una empresa de fármacos, en donde trabajo casi un año, a los 2 meses de estar ahí, ya estaba totalmente recuperada, volvió a ser el bombón de apure que era cuando vino la primera vez, allí conoció a un representante de ventas de una transnacional que le ayudo a entrar en este trabajo que tiene ahora.

Yo pienso que como ahora no nos veíamos casi, perdí algo de interés, ella estaba full de trabajo y ganaba muy bien, porque a finales de ese mis año en su nuevo trabajo ya habia comprado carro nuevo y su casa cambio bastante, me llamo por teléfono y me invito a un centro comercial, allí me conto que estaba vendiendo la casa y el carro porque se iba del país, le dieron la oportunidad de trabajar en México con la transnacional y que no desaprovecharía el chance.

Entre nosotros jamás paso nada, a lo mejor ella quedaría esperando o yo nunca me lo tome de esa forma, la hermosa Estela Dominga que llego a Maracay sin nada, se regresó a su tierra, lo perdió todo, hoy dia es una hermosa profesional, con múltiples oportunidades, se fue de Venezuela, se llevó sus hermanos, hoy dia tiene una familia allá, se casó con un extranjero de buena posición económica y continua trabajando, sus hermanos están con ella, todavía bajo su orientación, estoy totalmente seguro que aprenderán muchas cosas buenas de su hermana.

De vez en cuando me conecto por chat y hablamos un rato y como les dije antes. Le envié esta historia antes de publicarla y les escribo textualmente lo que me respondió:

Sabes, yo nunca entendí aquel momento cuando me dijiste… está bien corazón de acapro. Y hoy dia me impresiona saber cuan pendiente realmente estuviste de mi vida. De verdad me has hecho llorar, ablandaste el acapro, perdóname otra vez por no haberte dicho nunca nada, vales oro amigo, que cada gota del rio apure sea una bendición que te mando siempre tu mi loco gracias por esto…

Acapro: árbol muy usado para hacer casas, cercas o techos en los llanos venezolanos, el corazón de este árbol, se usa como columna o vigas, ya que por la dureza del mismo soporta mucho peso sin romperse ni doblarse.