Si se compara la evolución de la tecnología y las escuelas veremos que en lo que respecta a educación tenemos prácticamente el mismo sistema que en el medievo. Un aula donde un profesor instruye a los alumnos en un sistema rígido que muy probablemente inhibirá su creatividad. Hay que aprovechar la tecnología para cambiar la educación. Tenemos un acceso a la información que antes era impensable y permite que los alumnos sepan cosas que los profesores no son capaces de hacer. Por ello creo que debe cambiar a una dinámica de construcción del conocimiento y que los profesores sean facilitadores de la curiosidad de las personas. Saludos!