Cuando no querés aceptar que te hacen bien

in #escrito3 years ago (edited)

ericmartinez.96-20211008-0001.jpg
Generalmente cuando estás conociendo a alguien,
al principio no le das mucha importancia al asunto,
total tenés detrás de esa persona a los que siguen haciendo fila por si acaso; el ganado.
Todo empieza con un mensaje,
después intercambian números,
hay una llamada, algún chiste y risas.
Al otro día podrías hablar con los demás pero no,
elegís a la misma persona de la noche anterior,
y entonces ya no es un simple mensaje,
ahora le contás lo que hiciste en el día,
se les escapa alguna llamadita atrevida,
y de repente están contándose algún secreto.
Pasan los días, te gusta como te trata él o ella,
quedan en verse en algún lugar, uno paga la coca
y el otro la hamburguesa, quieren ser cordiales.
Todo salió bien en esa primer cita.
Llegás a tu casa y ya te dejó un mensajito
de buenas noches o quizá la terminan juntos,
enredados en una cama, flasheando amor,
una amistad fuerte o lo que sea.

Pasan dos o tres días y ninguno se escriben,
se sienten medios raros y desconcertados.
Y entonces te preguntás qué pasó ahí,
pensás que estás loco o loca por sentir
algún cosquilleo en el corazón, te negás,
te cerrás y no te queda otra alternativa
que volver a ese pensamiento ordinario
de quedarte en el molde de la soltería.

Pero días después vuelven
a intercambiar mensajes,
quedan en verse de nuevo.
borran los otros chat's del ganado,
a otros los silencian o los bloquean
para no dejar evidencia de su vida oscura.
Porque en realidad nunca terminan
de contar bien su biografía personal.
Y así están con idas y vueltas
pensando si es amor o no;
buscándole la quinta pata al gato
para justificarse que no funcionó.

¿A qué le tienen tanto miedo?
Pasa que no quieren aceptar que alguien
distinto/a pueda aparecer en su vida
para intentar hacerles bien.
Y ahí los dejan ir como si nada, y se quedan
con los mismos cachivaches de siempre,
con los que les llenan el ego y el vacío emocional
de vez en cuando y está bien, qué sé yo.
Pero por situaciones así es que después
ni ustedes mismos se creen suficientes
porque siempre se entregan a