Tienes pensamientos profundos sobre cómo afrontar los problemas y tomar decisiones sabiamente. Pedir ayuda y motivación a otros, especialmente a Dios, muestra una actitud sabia al afrontar los desafíos.

Sobre el éxito, usted subraya la importancia de asumir riesgos y aprender del fracaso. Esta visión es muy enriquecedora, ya que amplía la comprensión de que los errores son una parte natural del proceso de aprendizaje y no deberían impedirnos volver a intentarlo.

Justo ahora estoy recordando una máxima que leí en un libro que dice que el ser humano, debe apuntar a su objetivo y salir a su encuentro, no importa si no se siente preparado.

La frase decía: "Preparen, ¡Fuego!, apunten"