"Palabra clave de la semana: Aventura"

in Dream Steem7 months ago (edited)
Por acá me encuentro de nuevo para compartir con ustedes un relato relacionado con el término: "aventura".

Hechizo de mar

José Julián era un don Juan, un Casanova empedernido, tenía 21 años, buena posición económica, un físico cultivado a base de operaciones y muchas horas en el gimnasio, además había heredado el rostro de su padre, que era casi tan lindo como una muchacha de quince años.


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Pixabay

José Julián llevaba la vida de niño rico conquistador: Ferrari rojo último modelo, ropa importada de las más cotizadas marcas, delicados perfumes, y una chica diferente cada noche. Pero José Julián también hablaba varios idiomas, porque se había graduado en Harvard, y era muy bueno en el área de las finanzas.

El detalle era que José Julián tenía una vida secreta, pues cada cierto tiempo, cuando se aburría de su vida de Don Juan, se escapaba y se iba a escondidas de todo el mundo, a lo que él llamaba internamente "Mi paraíso personal". En ese momento, José Julián tomaba su avioneta particular y se iba hasta Cumaná, la capital del estado Sucre, en el oriente de Venezuela, y de allí, ya despojado de sus finas indumentarias, tomaba un taxi y se iba al muelle, y como cualquier ciudadano del lugar, tomaba un pequeño bote que atravesaba el golfo de Cariaco y llegaba a la Península de Araya, un lugar escondido y poco visitado por extranjeros; pueblo de pescadores, con un salina inmensa, poetas y artesanos del barro.


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Araya Wikipedia

Allí, en esa larga playa de arena blanca y suave, plantaba su carpa, abría su morral, tendía su alfombra que había comprado en un mercado persa de Frankfurt, ordenaba sus cosas: enlatados, frutas secas, una botella de vino español, agua mineral, mantequilla de maní, pan integral, algunas franelas, shores y algunos libros.

Los pobladores lo llamaban "El solitario", y no se metían con él, aunque estaban atentos por si necesitaba algo, ya que daba muy buenas propinas.

Esta mañana José Julián amaneció con ganas de dar un paseo en bote, así que pidió que le alquilaran uno, eso sí, con un buen navegante.

Al rato vio llegar el bote, un peñero con cubierta, piloteando una muchacha rubia, con rizos de oro y ojos azulísimos, tenía unos blue jeans recortados, y una camisa roja manga larga; llevó el peñero lo más que pudo a la orilla y desde allí grito:

-Épale, solitario, llegó tu bote, lánzate al agua, que no lo puedo llevar hasta allá.

José Julián se quitó los lentes de sol, se tiró al agua y llegó al bote:

-¿Y tú navegas bien? ¿no vendrá tu papá? -dijo José Julián desconfiado.

-Claro, dijo la muchacha sin voltear a verlo, hizo una maniobra con el timón y en unos segundos estaban con la proa levantada, buscando mar adentro.

Luego bajo la velocidad y le dijo:

-¿Adónde quiere que lo lleve, solitario -mientras se quitaba la camisa roja y se quedaba con la parte de arriba del traje de baño.

Hasta ese momento José Julián no se había percatado de lo bella que era su capitana, de súbito su espíritu de don Juan se despertó y se lanzó al ataque:

-¿Cómo te llamas? -le preguntó sentándose a su lado.

-Margarita -le respondió ella acelerando un poco.

-Tu nombre me da una idea, ¿me puedes llevar a Margarita? De repente me acompañas, y pasamos un buen momento.

-¿Un buen momento? -dijo Margarita extrañada -yo lo llevo hasta dónde usted diga, tenemos bastante gasolina, pero yo no me bajo del bote.

-Pero que aburrida eres, Margarita, ¿no te provoca divertirte un poco, bailar, tomarte algo? yo te invito -dijo José Julián esgrimiendo su infalible sonrisa.

-No, Solitario, lo mío es navegar, la pesca, y mi familia.

-Ah, ¿entonces eres casada? -dijo José Julián.

-No, dijo Margarita ahora mirándolo a los ojos, pero algún día lo seré y tendré cuatro hijos, y serán gente de mar como yo.

-Entiendo -dijo José Julián -pero mientras tanto ¿no te provoca tener una aventura?

-¿Qué llamas tú, una aventura? -preguntó Margarita sonriendo por primera vez.

-Pasar un buen momento, divertimos, tomar, comer lo que más te guste, bailar, vivir el día, y luego regresar y pensar que todo fue un sueño_dijo José Julián tratando de ser convincente.

La risa de Margarita se confundió con el ruido del motor, sacó una botella de ron de un bolso, se tomó un trago y luego dijo:

-Ya yo tomé el rumbo para Margarita, si se va arrepentir me dice -hizo un silencio y luego continuó diciendo:

-Yo no se cómo son las mujeres de allá, de dónde tú eres, Solitario, pero las de aquí no salimos de aventura con un hombre así como así, aunque sea bonito y de plata como tú.

-¿Y yo te parezco bonito? jajajaja -dijo José Julián.

-Bonito y bien bueno -dijo Margarita.

-Entonces, Si te caigo bien, ¿por qué no te bajas conmigo en Margarita?

-Porque yo no soy mujer de aventura, yo quiero un hombre de verdad, que me represente, que quiera vivir conmigo, que me monte un muchacho y que si está una noche conmigo, que no se olvide de mí al otro día, sino que se quede conmigo para siempre, aquí en la mar y en mi cama, esa es mi aventura.

Las armas de José Julián se quedaban sin fuerza ante Margarita, que no le quitaba la vista al rumbo, y que mientras el sol se levantaba se veía más grande y más bella.

De repente Margarita detuvo un poco la marcha del bote, hasta dejarlo quieto al ritmo de las olas. Luego le dijo a José Julián:

-¿Y yo? ¿Te gusto?

-Claro, claro, que sí, por supuesto -respondió increíblemente asustado José Julián.

No se esperaba esa reacción de Margarita.

-¿Cuánto es mucho? -preguntó Margarita, sin soltar el timón. Luego continuó diciendo:

-Tú a mí me gustas mucho. Te vengo viendo desde hace tiempo, esperando que aparezcas en el muelle, lástima que no sirvas para nada.

-¿Cómo que no sirvo para nada? no tienes ni idea de quién soy yo -dijo José Julián ofendido.

-Claro que sé quién eres tú, un riquito miedoso y flojo -le dijo acercándose a él, soltando el ancla, tomándolo por la mano -¿tienes el coraje de hacerme un muchacho?


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-Claro que sí -dijo José Julián, enredándose en un abrazo apasionado con Margarita, en el piso del bote, sobre una red que olía a salitre y a mujer de mar.

Es de madrugada, José Julián está en una piedra muy grande, cuatro niños lo acompañan, se ve salir el sol en el horizonte, en la orilla están los botes anclados; de la casa sale un olor a café, Margarita se asoma a la puerta, trae una cesta con comida, le da un beso, él se pone de pie. A lo lejos los pescadores le hacen una seña y él entiende que tiene que bajar.

Los botes zarpan, se dan a la mar, arranca la temporada de pesca, y José Julián se va para esa aventura, seguro de que Margarita lo estará esperando.

Fin


I am here again to share with you a story related to the term: "adventure".

Sea Spell

José Julián was a Don Juan, an inveterate Casanova, he was 21 years old, in a good economic position, with a physique cultivated through operations and many hours in the gym, and he had also inherited the face of his father, who was almost as pretty as a fifteen-year-old girl.

José Julián lived the life of a rich conquering boy: the latest model red Ferrari, imported clothes from the most sought-after brands, delicate perfumes, and a different girl every night. But José Julián also spoke several languages, because he had graduated from Harvard, and was very good in the area of ​​finance.


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The detail was that José Julián had a secret life, because every so often, when he got bored with his life as Don Juan, he would escape and go secretly from everyone, to what he internally called "My personal paradise." At that moment, José Julián took his private plane and went to Cumaná, the capital of the state of Sucre, in eastern Venezuela, and from there, already stripped of his fine clothing, he took a taxi and went to the dock, and as Any local citizen took a small boat that crossed the Gulf of Cariaco and arrived at the Araya Peninsula, a hidden place rarely visited by foreigners; fishing village, with an immense salt mine, poets and clay artisans.


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Araya Wikipedia

There, on that long beach of soft white sand, he pitched his tent, opened his backpack, spread his rug that he had bought in a Persian market in Frankfurt, organized his things: canned goods, fruits dried, a bottle of Spanish wine, mineral water, peanut butter, whole wheat bread, some flannels, shores and some books.

The residents called him "The Loner", and they did not mess with him, although they were attentive in case he needed anything, since he gave very good tips.

This morning José Julián woke up wanting to take a boat ride, so he asked to rent one, with a good navigator.

After a while he saw the boat arrive, a boat with a deck, piloted by a blonde girl, with golden curls and very blue eyes, she had cut-off blue jeans, and a long-sleeved red shirt; He took the peñero as far as he could to the shore and from there he shouted:

-Epale, loner, your boat has arrived, jump into the water, I can't take it there.

José Julián took off his sunglasses, jumped into the water and got to the boat:

-And you navigate well? Won't your dad come? -said José Julián suspiciously.

-Of course, the girl said without turning to see him, she made a maneuver with the rudder and in a few seconds they were with the bow raised, looking out to sea.

Then he slowed down and said:

-Where do you want me to take you, loner -as he took off his red shirt and was left with the top part of his swimsuit.

Until that moment José Julián had not realized how beautiful his captain was, suddenly his Don Juan spirit woke up and he launched the attack:

-What is your name? -he asked him, sitting next to him.

"Margarita," she responded, speeding up a little.

-Your name gives me an idea, can you take me to Margarita? Suddenly you join me, and we have a good time.

-A good moment? -Margarita said, surprised -I'll take you as far as you say, we have enough gasoline, but I won't get off the boat.

-But how boring you are, Margarita, doesn't it make you have a little fun, dance, have a drink? "I invite you," said José Julián, brandishing his infallible smile.

-No, Solitario, mine is sailing, fishing, and my family.

-Ah, so you're married? -said José Julián.

-No, Margarita said now looking into his eyes, but one day I will be and I will have four children, and they will be seafarers like me.

-I understand -said José Julián -but in the meantime, doesn't it provoke you to have an adventure?

-What do you call, an adventure? -Margarita asked, smiling for the first time.

-Have a good time, have fun, drink, eat what you like most, dance, live the day, and then come back and think that everything was a dream.

Margarita's laughter was confused with the noise of the engine, she took a bottle of rum out of a bag, took a drink and then said:

"I've already taken the course for Margarita, if you're going to regret it, tell me." He was silent and then continued saying:

Until that moment José Julián had not realized how beautiful his captain was, suddenly his Don Juan spirit woke up and he launched the attack:

-What is your name? -he asked him, sitting next to him.

"Margarita," she responded, speeding up a little.

-Your name gives me an idea, can you take me to Margarita? Suddenly you join me, and we have a good time.

-A good moment? -Margarita said, surprised -I'll take you as far as you say, we have enough gasoline, but I won't get off the boat.

-But how boring you are, Margarita, doesn't it make you have a little fun, dance, have a drink? "I invite you," said José Julián, brandishing his infallible smile.

-No, Solitario, mine is sailing, fishing, and my family.

-Ah, so you're married? -said José Julián.

-No, Margarita said now looking into his eyes, but one day I will be and I will have four children, and they will be seafarers like me.

-I understand -said José Julián -but in the meantime, doesn't it provoke you to have an adventure?

José Julián's weapons were left without strength before Margarita, who did not take her eyes off the course, and as the sun rose she looked bigger and more beautiful.

Suddenly Margarita stopped the boat a little, leaving it still, to the rhythm of the waves. Then he said to José Julián:

-Me too? You like me?

"Of course, of course, yes, of course," he responded incredibly scared.

He did not expect that reaction from Margarita.

-How much is a lot? -Margarita asked, without letting go of the helm. Then she continued saying:

-I like you so much. I've been seeing you for a long time, waiting for you to appear at the dock, it's a shame you're of no use.

-How am I not good for anything? "You have no idea who I am," said José Julián, offended.

-Of course I know who you are, a scared and lazy little guy -he said, approaching him, releasing the anchor, taking him by the hand -do you have the courage to make me a boy?


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It is early morning, José Julián is on a very large rock, four children accompany him, you can see the sun rise on the horizon, the boats are anchored on the shore; A smell of coffee comes out of the house, Margarita looks out the door, brings a basket with food, gives him a kiss, he stands up. In the distance the fishermen make a sign to him and he understands that he has to go down.

The boats set sail, they take to the sea, the fishing season begins, and José Julián leaves for that adventure, sure that Margarita will be waiting for him.

End

Invito a @marcybetancourt, @vivigibelis y @rosita1. Aquí la información