¿Quién soy y dónde estoy? Reto/concurso - Semana 2 @eudisdiaz

¡Salud y vida, amados steemians!

Con esta publicación, acudo a este Reto/concurso del genial @leonardoj333 el cual aún está vigente y cuyas pautas puedes revisar para que te nos unas.

retoconcurso.jpg
Imagen de @leonardoj333

Acompañado de un perro sucio y flacucho como él, el niño revisa cada montón de basura que llega al relleno sanitario.

Unas veces es llevada por camiones-volteo y ellos esperan a un lado, pero muy cerquita, para ser los primeros en revisar la carga. Otras veces (la mayoría, en realidad), es llevada por personas en sus vehículos de paseo y ellos corren hasta la carretera para tomarlas tan pronto las dejen a un lado del camino. Esas personas parecen temerles pues, cuando los ven correr hacia ellos, sueltan las bolsas de basura en cualquier lugar y regresan a toda prisa por donde entraron.

Entonces el niño, o quien llegue antes que él pues no siempre es el primero que nota la llegada de la gente, rompe la bolsa ahí mismo y comienza a extraer su contenido.

Todas tienen siempre cosas muy valiosas pero lo que mejor le pagan son las botellas (plásticas y de vidrio) – si tienen sus tapas son más apreciables aún – y es lo que siempre busca para llevar el sustento a su hogar.

§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§

Pero también está a la caza de otros objetos. Todos sus juguetes los ha encontrado ahí. Tiene una colección de robots y dinosaurios que ha ido encontrando de a poco entre los desechos de aquel lugar. A casi todos los robots les falta una pieza, pero los saurios están todos completitos y algunos hasta parecen nuevos.

También da importancia a otro tipo de cosas como piezas de electrodomésticos – aunque, por su edad, no sabe a qué artefacto pertenezcan o cómo se llamen – utensilios de cocina, prendas de vestir y cuadernos a medio usar. Estos últimos van con él a la escuela cuando no está tan cansado y cree que puede tomar alguna lección.

§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§§

Unos días atrás encontró un objeto muy extraño que conservó porque le pareció que podía venderlo en una chatarrera cercana al relleno, pero quiso mostrárselo antes a su maestra.

Cuando ella le dijo que aquello era un diapasón y que era la primera vez que ella tenía en sus manos una pieza de esas, desistió de la idea de venderlo pues le pareció que ya tenía un buen regalo de fin de curso para su maestra y lo guardó celosamente en su funda de objetos preciados que siempre cargaba a cuestas.

Ese día, antes de la hora de la salida, se acercó al escritorio de la maestra para consultar acerca del tiempo que aún les faltaba para la despedida. Abrumado por la proximidad de ese último día, regresó a su pupitre y estalló en ira al encontrar a dos de sus compañeros hurgando su funda de objetos preciados.

—Robaste mi sacapuntas— le acusó uno de los niños.

—Yo no robo; yo trabajo— Se defendió él, más airado a cada instante.

—Esta es su hojilla. La sacaste de su base— Insistió el otro mostrándole el mencionado objeto—. ¡Lo rompiste!

Con un veloz movimiento, el niño le arrancó la hojilla de la mano y, antes de que la maestra llegara junto a ellos, le cortó el cuello a su detractor quien no pudo decir ni una palabra más.


Gracias, @leonardoj333, por esta idea en forma de imagen que hace volar la imaginación

Gracias a mis queridas amigas @solperez y @marcybetancourt por apoyar estas ideas


@eudisdiaz.png

Sort:  

Gracias por escribir en español !
Estamos construyendo una comunidad para evitar el derribo de una casa historica , te agradeceriamos que te unieras a nuestra comunidad La casa del turron


     Diariamente hasta el sabado sortearemos 25 STM entre quienes nos ayudeis en redes sociales 
    <hr>
     Si no quieres recibir mas mensajes dinoslo aqui y disculpa

Saludos! Gracias por pasar por aquí y dejarme esa invitación. Ya les visito.

Wow! he quedado estupefacto con ese desenlace.

Su relato me trae el recuerdo de la única vez que he debido visitar el botadero de basura de la ciudad, fueron momentos desagradables y reveladores, pues ahí pude ser testigo de una parte de la población, en su mayoría infantil, que viven de los desechos de los demás, entre putrefacción y enfermedades.

Muchas gracias por su participación y la historia que me ha dejado impactado como aquella vez que fui al botadero.

Saludos desde Apure.

Saludos, @leonardoj333.
Esa es una realidad que nos toca muy de cerquita. Aquí en Cumaná se han multiplicado los botaderos (que ahora llaman "espontáneos") y en todos esos sitios se observan muchos niños peleando por los desperdicios. Para ellos cualquier objeto desechado por "los más privilegiados" es un tesoro.
Quedo agradecida por esta idea y ya estoy a la espera de tu nueva propuesta.
Un abrazo.