Mi vida entre gatitos–Blog: El veterinariosteemCreated with Sketch.

in Account Booster 👍4 years ago (edited)

¡Hola! Hoy les hablaré de la primera experiencia en el veterinario con Miss Venus.

Hace unas semanas, para el día de las madres, mis hermanos (ellos viven en otra región) mandaron una docena de cupcakes para mi mamá y mi abuela, cabe destacar que mi mamá ya no puede comer chocolate en ninguna presentación por problemas estomacales, por lo que los que le tocaban a ella eran de vainilla. En cambio, a mi abuela sí le mandaron de los más chocolatosos que pudieron pedir (y estaban deliciosos). Todo bien hasta allí, ¿Cierto?, el problema empieza en el momento en que los dejaron destapados en la mesa del comedor, y solos. Por lo que la curiosidad y la gula casi mata a mi pequeña hija de cuatro patas. Por suerte, no comió demasiado, y actuó de manera normal el resto del día.

Al día siguiente, noto que la pobrecilla no quería levantarse de su cama. Unas horas más tardes, mi papá y yo nos fuimos al doctor, en transporte público, viajando de la forma más tercermundista que se puedan imaginar (autobús desgatado, gente apretada y sin mascarilla. Debo destacar que el doctor vive bastante lejos, y había que ir caminando unas seis cuadras más, por suerte, Venus se portó bastante bien en el trayecto.

En el veterinario aprendí varias cosas importantes a la hora de aplicar el tratamiento en casa, y la más importante y resaltante es:

redoble de tambores

Llevar una funda de almohada. Puede sonar loco, no se los niego, pero ayuda un montón a la hora de inyectar a los gatos, ya que te permite guardar sus cuatro patas y su cabeza, y si ya tienes bastante experiencia, puedes inyectarle a través de ésta.

Espero les haya agradado mi forma de escribir.

Me despido con una foto de Venus semanas antes del incidente.

~Cece. T

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