Bien dice el dicho que el dinero no hace la felicidad, ayuda pero no es lo esencial.
Los afectos y el valor de la familia no tienen precio, tu has encontrado el camino que más te llena de felicidad, ser agradecido es un sentimiento de humildad y generosidad con los que te rodean y te aprecian.
No es sacrificio es un acto de amor, es la lucha diaria por la felicidad.
¡Gracias por compartir, te deseo el mejor de los éxitos!