Cuando observamos con cautela podemos encontrar tesoros.

Me encanta la fotografía de calle por que tengo mucho que mostrar. La calle es oro.

Tomar fotografías tiene su lado bueno y su lado malo.
Muchas veces podemos tomar fotos impresionantes incluso sin siquiera planearlas, y lo malo es cuadrar un plano y que la fotografía salga borrosa, oscura o muy clara.

Iba con mi papá en su camioneta y aproveché para llevarme la cámara, muchas fotos no las cuadré al momento y fueron improvisadas.

Amo usar el plano contraluz porque es excelente para resaltar una silueta.

Fotos en el momento preciso, tomar una fotografía es presionar el botón y listo, ¿pero que capturas?.

Desde mis ojos la calle se ve de ésta forma, lo cotidiano tiene mucho que mostrar solo debemos prestar atención.

Cuando tomo fotografías en el exterior realzo dos cosas, los colores o las sombras, si hablamos de naturaleza junto al atardecer las fotos pueden quedar como si estuviera editada con saturación.

Con práctica podemos capturar una imagen en el momento adecuado , de manera que no se vea borrosa.

En la calle nos podemos deleitar con los colores, aprendemos a descifrar gestos, nos damos cuenta del trabajo duro y la vida diaria, un tema que quizá parece aburrido, pero en realidad esconde bastante.

Mientras voy en el transporte imagino que llevo una cámara fotográfica y armo escenarios, así practico para que cuando tenga la oportunidad no salga mal, es un consejo para quienes toman la misma ruta y no saben cómo comenzar a capturar momentos.

Gracias por apoyarme, espero que les agrade mi trabajo, un abrazo, Ale.

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Todas las fotos de mostradas en este post fueron tomadas por mí con mi cámara Nikon Coolpix P500.