Lunes de Escritura|| El niño que deseaba Tener una Madre

Había una vez un niño llamado Pedro el cual vivía con su padre en un pequeño pueblo y su madre había muerto cuando el era muy pequeño de una rara enfermedad, su padre y su abuela eran quienes lo cuidaban, Pedro era un niño muy cayado no hablaba mucho, pero se portaba muy bien y tenía muy buenas calificaciones en su escuela, además era muy amigable.

En la escuela muchos niños se burlaban de él por no tener madre, además le decían el raro, le decían cosas hirientes y lo excluían de las actividades que lo entristecían. Pedro anhelaba tener una madre que lo abrazara, lo cuidara y le diera todo el amor que necesitaba, aunque queria mucho a su abuelita no era lo mismo ya que al llegar el día de las madres todos iban con las suyas y el solo llevaba a su abuelita, pero los nos se burlaban de él.

Un día, al pequeño puenlo llego una maestra muy buena, quien fue su profesora en tercer grado, ella lo apoyaba mucho y el la quería mucho, un día Pedro la invitó a su casa que lo acompañará cuando salio de la escuela, el quería que conociera a su abuelita y su padre, al llegar alla le ofrecieron amablemente que se quedará a almorzar, ella acepto con gusto, ese dia almorzaron todos y Pedro estaba muy feliz.

La profesora Rosita era muy amable, comprensiva y cariñosa, el padre de Pedro quedo flechado al conocer a la nueva maestra, por lo que desde ese día se dio a la tarea de buscar a Pedro todos los días para vee a la maestra y llevarle cualquier detalle que podía, aunque él era un simple campesino, él sabia que podía darle una vida feliz.

A medida que pasaba el tiempo, el padre de pedro y la mestra Rosita se fueron acercando cada vez más, Ella le tomo mucho cariño a Pedro y lo ayudaba con sus tareas escolares, lo llevaba a pasear y le enseñaba nuevas cosas. Pedriti se sentía feliz al estar a su lado, además le encantaba estar a su lado, como si finalmente hubiera encontrado a la madre que tanto había deseado.

Un día, su padre le dijo a Pedrito que se casaría con su maedtra y que ella se convertiría en su madre, Pedroro no podía creer su suerte era todo lo que había pedido a Dios, una madre que lo amará a él y a su padre, desde ese momento, Pedrito comenzó a ser el niño más feliz sobre la tierra, ya no estaría solo, ya pronto tendría una madre.

El padre de Pedrito y su maestra se casaron, y el día de la madre, Pedrito celebró por primera con su madre quien lo amaba, le preparó una tarjeta especial, le dio un regalo hecho con sus propias manos y le agradeció por todo el amor que le brindaba, ella lo abrazo y le dijo que era feliz siendo su madre.

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Y así, Pedrito encontró el amor y la felicidad que tanto había buscado, una gran madre, ya los niños no se burlaban de él por el contrario lo respetaban ya que ahora tenía una gran madre, quien también lo amaba mucho.