La Escuela Técnica de Música Vicente Emilio Sojo, ha sido la cuna de muchos músicos que han cosechado triunfos a nivel nacional como internacional, como por ejemplo René Henríquez, Daniel García en Estados Unidos, Vicente Freijeiro y Gerardo Estrada, a nivel mundial, Dalina Ugarte en Alemania, entre muchos otros.

Misión:

Constituye una obra de acción social que radica en la propia comunidad, de inclusión total consagrada en la formación en valores, culturales, morales y éticos desde la infancia pasando por la juventud e incluyendo a los adultos y mayores a través la instrucción y la práctica colectiva e individual de la música, dedicada a la capacitación, prevención y recuperación de los grupos más vulnerables del país, tanto por sus características etéreas como por su situación socioeconómica, tomando como ejemplo de organización social a la agrupación musical de mayor número de integrantes y el mejor ejemplo de organización social.

Visión:

Es una institución de concepción humanista, con un alto concepto de excelencia musical, que contribuye al desarrollo integral del ser humano. Se vincula con la comunidad a través de la participación, la cooperación y el cultivo de valores transcendentales que inciden en la transformación de la comunidad con sentido social sin distinción de raza, credo, status social con proyección hacia la integración familiar.
Se cuenta con un recurso humano altamente capacitado dirigido al logro de una meta común, con mística y gozo, formando equipos multidisciplinarios de integración social sin exclusión a ningún ser humano que desee incursionar en el maravilloso mundo de la música
Se reconoce la Institución Orquestal como el mejor ejemplo de organización social y una oportunidad para el desarrollo personal intelectual, espiritual, social y profesional, formando un ser humano integral desde temprana edad hasta edades avanzadas, orientada una mejor calidad de vida.

Filosofía:

Nuestra filosofía se basa en el enfoque social, humanista y constructivista donde los participantes de esta institución cumplen a través de la música sus sueños de realización personal, profesional y de integración comunitaria. Esta institución es ejemplo del verdadero desarrollo endógeno, pues nace de la necesidad de una comunidad, que encontró en esta institución una fuente de trabajo armonioso en beneficio de toda una comunidad con sentido de pertenencia que hace de ésta una institución sólida y que ha demostrado que en la unión está la fuerza, ya que ha conseguido escalar los más altos niveles en su estilo derrotando los obstáculos de su ubicación geográfica, del bajo promedio de poder adquisitivo, los problemas de transporte y seguridad que enfrentan, sin contar otros problemas propios del entorno social de esta comunidad.

Es ejemplo de la masificación del arte musical comunitario sin exclusiones, mientras otras instituciones son selectivas en edades, condición social, de salud, esta institución ha logrado integrar a toda una pluralidad de personas con el solo propósito de mejorar nuestro entorno social a través del extraordinario mundo de la música haciendo integras, felices, útiles a más personas cada día.
Nuestro eslogan:

¡Haciendo música construimos patria!
Nuestros egresados ocupan en sus respectivos campos de desarrollo laboral puestos de mucha responsabilidad, esto debido a que la música es científicamente comprobado un instrumento de desarrollo de la inteligencia, aunado a la promoción y siembra de valores humanos, además de crecer en una agrupación donde prevalece el trabajo en equipo, (tocar todos juntos), el cumplir con el rol que le corresponde (ejecutar su partitura), siendo solidarios siguiendo una meta (que suene magistral), bajo la tutela del líder (el director), los hacen profesionales integrales que se destacan por su eficiencia en cualquiera de las áreas que seleccionen para su desarrollo personal por lo que esto se convierte en un instrumento para hacer de nuestra patria una patria grande.

Fundación Orquesta Sinfónica Libertador

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Fue fundada en 1991, con el nombre de Orquesta Sinfónica Vicente Emilio Sojo, pero en 1995, cambia de nombre, en honor al naciente Municipio Libertador, que estaba en proceso de creación. Iniciativa de un grupo de profesores con sensibilidad social y artística para dar respuesta a una necesidad que habían detectado un gran grupo de la población de Tocuyito, como era la ausencia de actividades de recreación y de cultivo de las artes en esta comunidad. Siendo una agrupación de enfoque humanista su prioridad es poder ofrecer alternativas del disfrute de música de alta calidad y la formación en las distintas ramas de la música.

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¡Cuando muchos pensaban que era imposible, nosotros lo logramos!