El  que una  vez se  perdió.

Dios es amor y esto también.
No necesita ayuda
Se congeló en previsión de
Y que la luz se apague mañana,
Muerte, pensamos solo para no tener miedo a la sangre.
Cuando él guió el desierto.

La paz viene tom
Una ventisca en ríos sombríos,
Voy allí con tu toque y nombre.
Y lujuria - ¡el diablo ya nos ha llevado!..
Y luego, agarrando sus manos bajo la lluvia,
Para cerrar en la habitación de la cerradura.

¡Hace poco no te conocía en absoluto!
Como si fuera
A los gritos de la multitud diabólica.
Color de la caída de la estrella todo el cielo.
Y a la hora de la medianoche a la vela para sentarse.
Le pasa a alguien gentil.

Ella vuela a los cielos
Lágrimas, anhelo y viento helado.
Y para no dar pasos, se les ocurrió una canción.
De los golpes del destino ciego.
Y le da generosamente el collar al que tiene la cara brillante.
De lo que realmente se enferma.

Estas son las profecías:
Eso es solo contar hasta cien...
Levantando ruinas de oro.
Olvidando todos los destellos de mayo.
Tratando de llegar a un significado justificado,
No hay flujo del corazon.