Serie de relatos cortos. Acronías de un país imaginario: Obontico. Próculo Flequillo, testamentario defenestrado

Próculo Flequillo, su origen

Nunca le perdonó a su padre que estuviese ausente el día de su nacimiento, aquel 1 de diciembre, no tenía porqué haberse muerto ocho meses atrás, ha debido acaecer el fallecimiento, como máximo cualquier día de julio de ese mismo año, de ser así no sería objeto de miradas despiadadas y murmuraciones de las otras viudas, las solteras y las divorciadas contemporáneas de su madre.
-Se llamará Próculo- sentenció el cura mientras caminaban por las camineritas de la plaza sombreadas por mamones machos de frutos grandes y dulces- está escrito: sin un papá cercano tendrá que ser autosuficiente, tal como su significado en latín...
-Pero padre, a mi no me gusta- resignada la madre calló ante la mirada severa del sacerdote...
-Mujer- continuó el clérigo- no te das cuenta que nació el mismo día de San Próculo Mártir...
El abogado Cesario Méndez Osario, de punta en blanco que caminaba tras la pareja, se asoció a la discusión.
-Perdonen que interceda en defensa del niño que lleva usted el los brazos señora Calvo, pero la verdad es que en la historia existen otros Próculos igualmente infortunados y sodomizados cruelmente como el santo.
Don Germánico, volteó con el seño fruncido y recriminante ante la voz del inoportuno auto invitado al diálogo:
-¿Quién le ha dado velas en este entierro- espetó Don Germánico- Además el Próculo al que se refiere, usted señor mío, fue violado por Calígula, perseguidor cruel y despiadado de los cristianos.
-Gaius Julius Caesar Augustus Germanicus, Cayo Julio César Augusto Germánico- completó Cesario Méndez, amante de algunos latinismos que le hacían lucir importante en aquel pequeño poblado de sabana- pero, insisto es un nombre que lo marcará durante toda su vida porque el que se queda calvo, siempre se le ve donde estuvo el cabello y...
Cesario Méndez Osario calló ante el bastón con empuñadura de plata y crucifijo en alto relieve, que Don Germánico blandía sobre su cabeza, y optó por irse a sentar en un banco de la plaza a la sombra de un mamón. Años más tarde recordaría ese momento, cuando acompañara a Próculo Flequillo Moroso Moroso Calvo a la Academia de Sub Oficiales, con la carta de presentación escrita por el prestigioso dirigente nacional Alfanal Estrella, dirigida al Comandante y Director de la institución General Sodumus Kontrapópulus, héroe de la guerra de los Contras, quien había combatido también en Budapest en la columna de artillería móvil con los famosos tanques “ivanes”, acompañados de los lanzacohetes “katiushkas”.
-Esa fue la primera vez que tuve la oportunidad de acercarme a tu mamá, Próculo. Desde que quedó viuda busqué la forma de acercármele, créeme que, en lugar de abogado y político, hubiera querido comadrón para traerte al mundo, pero ese oficio está reservado para mujeres habilidosas... y no siempre muy aseadas, por lo que hay tantos decesos infantiles...... tanta mortandad de recién nacidos...