¿Cómo famoso va a la raíz.
Se dignó venir a la boda.
Solo para ver el resplandor del fuego en los lienzos de tus pupilas.
Reconoció el letargo a pesar del temblor y el frío.
Aunque fuma incluso milagrosamente un pájaro, incluso un pez.
Maldijo y no pudo jurar que no puede
Y luego me miraste con mis propios ojos.
Y dejar que los centauros caminen sobre él.
Y luego te duermes en tus brazos...
Te abrazo con ternura.