Travesías - Crea Música: Serie Fotográfica
Te presento a Juan Andrés
Introducción
Hoy empezamos este nuevo post para la serie de Travesías con algo bastante distinto. En los últimos posts hemos echado un vistazo humano a Nueva Esparta, visto a unos Kitesurfistas volando, y dimos una vuelta por el pasado de Isla de Coche. Pero hoy quiero compartir algo distinto con ustedes.
En el 2016 me uní a un grupo de improvisación musical llamado Crea Música. El grupo realmente nunca tuvo un líder, pero quién hacía que las cosas sucedieran era Juan Andrés, el tipo de la foto de portada. El grupo tampoco era algo fuera de este mundo: solo un montón de estudiantes de ingeniería reunidos en un estudio grande, vacío y caluroso para improvisar música en tiempos raros (nos encantaban el 7/8 y el 11/8). Nada especial, pero era simplemente mágico. Estar ahí creaba una conexión misteriosa entre todos nosotros. Algo tan básico como tomar varios instrumentos (o incluso solo cantar) y dejar que la música fluyera, para nosotros, se convirtió en una manera de dejar que todo fluyera: "Lo más cercano que un ateo puede llegar a una experiencia religiosa", como decía Juan Andrés.
Hoy en día, el grupo aún se reúne semanalmente para improvisar música, aunque yo ya no suelo participar de forma regular. Sin embargo, y para ser honesto, dudo mucho que haya otra cosa como lo que sucede en ese lugar. Las vibras, la música... todo se junta para hacer de tocar unas notas un evento casi trascendental.
Espero que disfrutes este humilde trabajo
Crea Música
Reunidos en círculo, algunos miembros de Crea Música
Tú, tu música, y unos botes de pintura, de cuando los de mantenimiento arreglaron las paredes
Ver volúmenes, escuchar luces
El conductor tribal
Prohibido tocar solos en el estudio
Bajo, guitarra, flauta transversa, violín, teclado, baterías, didgeridoos... tú nombralo, nosotros lo teníamos
Improvisando letra con pedacitos de poesía
Un lugar donde las cosas se salen de control diariamente
Tocar para Crea Música no era como tocar para alguna banda; no era una tarea. Te hacía querer tocar. Te hacía interactuar con las personas a tu alrededor, de una forma increíblemente satisfactoria. Veías una cara y de inmediato reconocías a donde iba una canción. Veías una mano moverse y tu mente se preparaba para volverse loca en un gran final. No se trataba solo de hacer música efímera. No se trataba solo de desafíar a la música de partitura. Se trataba de estar en ese momento y en ese lugar, y crear y escuchar sonidos que nacerían allí y morirían alli. Se trataba de vivir el momento, y esos serán momentos que jamás olvidaré.
-SA
No dudes en seguirme si quieres ver más de mi trabajo! Pronto estaré probando un formato de post más corto que quizá les guste :) Si les gusta, comenzaré una serie para enfocarme en fotografías individuales y discutirlas, así que en serio: sígueme! No olvides dejarme un comentario contándome lo que piensas acerca de mis fotos, y, si te han gustado, considera darle un upvote a mi post para alegrarme el día :)
Todas las fotografías fueron tomadas con mi vieja confiable Nikon D90 + Nikkor 50mm F/1.8G, rodeado de toda clase de músicos locos.
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