Cada uno tiene sus propias prioridades.
Tú y yo no fuimos sin razón.
Como en la tristeza y en la alegría,
Para cumplir tus sueños!
Cada vez menos calma sustituye a la tormenta.
Y no enamorarte.
Beber en la ociosidad libre.
En su mano un ramo, y detrás del vino.
El amor tiene sus propias leyes.
Con respecto a lo anterior, entonces, que problemas tienes?