Experiencia Paranormal #11: Incubus, un demonio sexual.



Lana se acostó temprano con escasa ropa y el cabello color ébano suelto sobre la almohada.

Dormida aún, sentía que la miraban, pero no podía abrir sus ojos, de repente, un peso sobre sus hombros y piernas la inquietaron. La sensación de que alguien o algo se posó sobre ella se hizo manifiesta.

En medio de sus sueños intentó gritar sin éxito, su cuerpo buscaba incesante moverse, pero se le hacía imposible, de repente empezó a sentir sus pezones endurecerse, cuando fríos besos recorrieron su cuello y pechos.

La sensación de que manos se posaban en su cuello asfixiándola, apretando sus brazos era aterrador y orgásmico, un vaivén energético frotándose contra su piel y susurros lejanos en sus oídos que le decían “Incubus”.

Lana sintió orgasmos continuos, vez tras vez, hasta desmayarse. Perder el conocimiento fue la única salida que encontró para escapar de la situación. A la mañana siguiente, pudo ver como moretones en su cuello y brazos se mostraban semejantes a dedos, en su sexo pudo notar humedad.

Esa mañana, la niña revisó en Internet la palabra “Incubus”, su sorpresa inmediata, fue que en su búsqueda apareció que “Un Íncubo, es un demonio que disfruta poseyendo carnalmente a sus víctimas, la mayoría de ellas, mujeres. Estos demonios buscan desesperadamente reproducirse con el objetivo de conseguir descendencia.”

Lana lloró amargamente, temía sinceramente que estaba enamorada de un espectro que quería engendrar en ella una descendencia para procrear las más perversas acciones en la tierra.