Nutrición, Salud y Embarazo.

Alimentación y Nutrición en el Embarazo

El embarazo es un estado fisiológico en el cual, la mujer debe tener los cuidados necesarios para que su bebe se desarrolle con completa normalidad y llegue a término felizmente, esto incluye una adecuada alimentación y nutrición.

Debido a los nuevos cambios que se dan en el cuerpo de la madre y el crecimiento del bebé, en el embarazo se van a ver aumentados las necesidades de energía y nutrientes.

Es por ello que la mujer embarazada debe tener un equilibrio adecuado en su alimentación, con un aporte energético suficiente para el crecimiento de su bebé. En una mujer con un peso adecuado en el primer trimestre, puede aumentar de peso de 0 hasta de 3 kg, en el segundo trimestre de 4 a 6 kg y en el tercer trimestre 5 a 7 kg.

Una mujer embarazada no debe comer por dos, solo se agregan 300 kcal a su requerimiento, esto pudiera ser cubierto al realizar 2 meriendas al día por ejemplo yogurt natural con una ración de frutas, un sándwich o una arepa mediana rellena, una taza de avena o cereal cocido con leche.

Las necesidades de proteínas, se ven aumentadas de 25 a 30 gramos extra, lo que equivale a 1 vaso de leche, 3 cucharadas o 1 rebanada de queso, carne de res, cerdo, pollo 3 cucharadas o un 1 huevo.

Durante esta etapa se deben incluir ácidos grasos esenciales como el omega 3, omega 6 y omega 9 presentes en aceites vegetales de soja o de maíz así como en los frutos secos como las semillas de auyama, girasol, linaza, merey y el maní. Otra fuente importante de estos ácidos grasos esenciales van a ser los pescados entre los cuales podemos optar por la sardina.

Los carbohidratos deben ser consumidos de forma apropiada para mantener valores de glucemia adecuados de preferencias deberían consumir panes y cereales integrales (arroz, pasta, avena en hojuelas), tubérculos (ocumo, yuca, papa, ñame), granos y frutas puestos que además de aportar energía, van ayudar en el aporte de fibra dietética la cual puede mejorar los problemas de estreñimiento.

Las necesidades ácido fólico aumentan a (800 microgramos al día) el cual es muy importante durante las primeras semanas del embarazo dado que los defectos en el cerebro y en la espina dorsal se producen en esta etapa antes de que la mujer se entere que está embarazada, es importante que tenga suficiente ácido fólico en su sistema antes de quedar embarazada.

Esto no es difícil de cubrir pues ½ taza de lentejas tienen 200 microgramos, ½ taza de espinacas hacen 100 microgramos, ½ taza de brócoli cocido y ½ taza de arvejas verdes tienen 400 microgramos de ácido fólico.