¡Viajando por Venezuela y Colombia! - ¿Cómo me fue?
Viajar es una experiencia increíble.
Por eso quiero compartir
este blog de viaje con ustedes.
Hola queridos steeamians. Hace un par de meses realicé un viaje por vía aérea y terrestre desde Venezuela a Colombia. ¿Es tan difícil viajar en Venezuela como dicen? ¿Qué tal es la situación en la frontera colombo-venezolana? En este post les contaré mi experiencia al respecto.
Un chamo parcero: Soy Colombo – Venezolano
Para empezar esta historia debo aclarar algo: yo poseo las dos nacionalidades de estos países. Mi papá es colombiano (de Cali) y reside en ese país, mi mamá es venezolana (de Monagas) y también vive en su país de origen. Yo, que vivo en Venezuela con mi mamá, he viajado a Colombia durante toda mi vida a visitar a mi papá. Conozco y quiero a ambos países, pues ambos son parte de mi identidad.
¿Por qué menciono esto? Pues porque mi situación migratoria al viajar de un país a otro es distinta a la de un turista común. Más adelante se darán cuenta de qué forma.
Entonces un día, tras renunciar a mi trabajo y estar al fin con tiempo libre, decidí viajar a Colombia a visitar a mi papá pues tenía tiempo sin verlo, además aprovecharía para arreglar algunos de mis papeles en ese país. Así comenzó esta travesía.
Saliendo de Puerto Ordaz
Mi ruta de viaje era larga: ir hasta Caracas, tomar un vuelo a La Fría (Táchira) e ir hasta la frontera. Luego tomar un autobús y viajar hasta Pamplona, el pueblo en donde vivía mi papá, quien acaba de mudarse a Santa Marta.
Comencé a buscar pasajes de avión hasta Caracas. No conseguí. Esto es bastante común en Venezuela: con la crisis económica, las aerolíneas nacionales poco a poco se han ido deteriorando al igual que sus rutas comerciales. Sin embargo, pude encontrar un vuelo desde la ciudad de Barcelona, estado Anzoátegui. De esa forma yo, que vivo en Puerto Ordaz, debía moverme hasta allá por vía terrestre.
Decidí hacerlo con los llamados “carritos” del terminal de pasajeros. Allí se presentó otro problema: cobraban en efectivo y las cantidades eran bastante altas. Como los cajeros y bancos no dan el efectivo suficiente, tuve que cambiar 20$ por Bolívares. Así pues, emprendí mi viaje por carretera a las 6:00 de la mañana hasta Puerto la Cruz.
Llegué a eso de las 11:00 am al Aeropuerto Internacional General José Antonio Anzoátegui. Allí debí esperar hasta las 9:00 pm, hora en la que saldría mi vuelo hasta Maiquetía. El vuelo tuvo un retraso medio y terminé llegando al Aeropuerto de Maiquetía a eso de las 11:00 pm. De allí fui directo a mi hotel gracias al servicio de transporte con el que este último cuenta.
Aeropuerto de Barcelona. Fuente
Aeropuerto de Barcelona. Fuente
Catia la Mar: ¡Siempre me ha encantado!
Catia la Mar es una parroquia del estado Vargas ubicada junto al aeropuerto de Maiquetía. En ella queda un hotel llamado “Hotel Catimar” que posee “las tres b”: bueno, bonito y barato. Esa es mi parada preferida cuando debo pasar una o dos noches entre un vuelo y otro.
Como mencioné antes, el hotel cuenta con servicio de transporte de ida y de vuelta al aeropuerto durante las 24 horas del día. Además, la atención de sus empleados siempre es responsable y atenta. Cuenta con un restaurante y su menú está bien abastecido con comida deliciosa. Pero lo mejor de todo es… ¡que está frente a la playa!
La playa de Puerto Viejo se encuentra a la distancia de cruzar una calle. Es un sitio ameno y familiar en donde se va a disfrutar sanamente. Recuerdo que la primera vez que estuve allí tenía mis sospechas por la posible inseguridad del sitio. Sin embargo, la recepcionista del hotel me garantizó que era un sitio seguro. He estado en varias ocasiones en la playa Puerto Viejo y nunca me ha pasado algún acontecimiento lamentable.
Puerto Viejo. Fuente
De Maiquetía a La Fría
Mi estadía en Catia la Mar fue de apenas un día. Al siguiente, salí muy temprano al aeropuerto pues mi vuelo despegaba a las 6:00 am. No tuve problema alguno para abordar, aunque nuevamente el vuelo tuvo un ligero retraso de media hora.
El avión desde Maiquetía surcó el centro y los andes venezolanos. Así, tras 40 minutos en el aire aproximadamente, llegué al aeropuerto "Francisco García de Hevia" en la pequeña ciudad tachirense de La Fría.
Al llegar tuve que tomar un taxi hasta su terminal de pasajeros. Allí no tomé fotos como medida de cautela, aunque el taxista me aseguró que esa zona era muy segura. En el terminal esperé a mi papá quien había viajado desde Colombia para recibirme. Al llegar, tomamos un taxi que nos llevó hasta Ureña, ciudad en la frontera con Colombia.
Maiquetía. Fuente
Maiquetía. Fuente
Aeropuerto de La Fría. Fuente
Pasando la Frontera
Llegamos a la frontera a eso de las 2: 00 pm. Como muchos saben, cruzar la frontera es una verdadera ruleta rusa. Es decir, puede que no te pase nada intentan hacerlo, o bien puede pararte la Guardia venezolana y ponerte alguna problemática.
Como les mencioné antes, soy ciudadano colombiano también. Por eso no pasé por el puente de San Antonio del Táchira, punto fronterizo en donde se encuentra migración. Ese sitio es muy famoso por poseer grandes colas de migrantes venezolanos que intentan pasar a Colombia, ya sea para radicarse en ese país o para continuar hacia otros destinos.
Para pasar el puente de Ureña, únicamente necesitaba de mi cedula venezolana y de mi cedula colombiana. Tuve mucha suerte pues en el punto de control de la guardia venezolana no hubo problemas. Luego, al pasar el punto de control de la guardia colombiana, pude seguir adelante.
De viaje a Pamplona
Ya en Cúcuta, primera ciudad colombiana tras cruzar la frontera, fuimos por algo qué almorzar. Allí comencé a ver la realidad de muchos venezolanos que buscan un mejor futuro fuera de su país. No intentaré dar un discurso acerca de esta realidad, solo diré que desde los 8 años he viajado a Cúcuta, y que nunca antes había visto a mis compatriotas venezolanos en tal situación de adversidad.
Estuvimos en Cúcuta alrededor de 2 horas. Luego nos dirigimos al terminal de pasajeros de la capital del Norte de Santander. Allí tomamos un bus que nos llevó hacia la cordillera colombiana. Finalmente, tras 2 horas de camino, llegamos a Pamplona.
Describir este pueblo encantador y tradicional daría cabido a un post completo. ¿Qué te parece? ¿Te gustaría conocer acerca de este destino? Dímelo en los comentarios y estaré encantado de hacerlo.
Pamplona, Colombia. Fuente
Hola @celsoemilio muy interesante el post.
Ajeno a que he viajado por Colombia puntualmente no conozco esa zona de Pamplona así que toda info al respecto será bienvenida.
Próximamente en mi blog de viajes estaré contando varias vivencias en Colombia, hoy en día aun estoy subiendo posts de mi experiencia en el viaje a Japón.
Gran saludo
Muchísimas gracias por tomarte el tiempo de leer el post. Pamplona es un lugar muy bonito, te lo recomiendo. ¡Qué genial viajar a Japón! Debe ser un gran experiencia.
Un abrazo grande.