Tipos de Coaching

 Como ya habíamos conversado, el coaching es un tipo de guía para alcanzar lo que deseamos, pero dependiendo de nuestras metas u objetivos personales, se necesita elegir qué tipo de guía necesitamos. 

Existen tantos tipos de coaching como metas nos propongamos, no es lo mismo querer lograr una meta a nivel personal que a nivel profesional, la orientación debe ser distinta ya que el contexto es distinto. 

El coaching mas común es el coaching personal, este se basa en desarrollar las habilidades necesarias para lograr nuestros objetivos personales utilizando para ello la maximización de las cualidades personales del individuo, su lema es “el poder del cambio está dentro de t”i, y se basa principalmente en lograr cambiar la actitud de la persona y la forma de ver la vida, al lograr esto, las habilidades innatas de la persona florecen y “como arte de magia” las cosas comienzan a “fluir”, comienzas a reconocer habilidades y destrezas que siempre has tenido y nunca las reconociste.

 

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También existen otros tipos de coach que van dirigidos a otros aspectos de nuestras vidas, existen coach familiares, que se basan en fortalecer el bienestar dentro del núcleo familiar, coach organizacionales, los cuales se basan en lograr cambios positivos  en los trabajadores de una forma colectiva dentro de una organización o empresa, coach laborales, que nos ayudan a mejorar nuestro potencial laboral y así aportar más a la organización a la que pertenezcamos, coach de liderazgo, para mejorar nuestra influencia positiva sobre otras personas o equipos de trabajo, coach deportivos, dirigido a mejorar nuestro desempeño físico.

Existen muchos más tipos de coaching, tantos como necesidades o logros se tengan. Dependiendo de la necesidad que reconozcamos en nuestras vidas, podemos elegir la mejor guía (coach) para satisfacerlas. 

Como hemos hablado, el coaching es una técnica o guía para el logro de nuestros objetivos, por tal razón, el requisito principal y esencial, es saber que queremos mejorar o lograr en nuestras vidas. Aunque no lo crean, lo más complicado es reconocer en que aspecto de nuestras vidas estamos fallando y que necesitamos pedir ayuda. 

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Comencemos por reconocer en que necesitamos ayuda y así elegiremos el mejor camino que nos lleve al éxito…