¡Me pescó otro clic!

¡Me pescó otro clic!

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Tal vez es la frase que te llega a la mente cuando ves una un sitio, imagen, anuncio, mensaje, titular, gif o algo en la web que atrapa tu atención. Despertando en ti curiosidad; hasta el punto de no aguantar, de no poder evitarlo, conduciéndote a realizar un clic sobre eso que te cautivó.

A este efecto se le llama Clickbait, en español, Ceboclic, Clicanzuelo, Ciberanzuelo o Cibercebo. Es una práctica creada por los especialistas del marketing digital para lograr que sus sitios o publicidades obtengan más visitas y con ello un mayor posicionamiento en la web.

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Lamentablemente, en ocasiones, ésta estrategia se convierte en una técnica no agradable o aceptada por los usuarios de la web. Esto debido a lo que se muestra luego de dar el clic; por ejemplo, contenidos no esperado, encadena a varios sitios para seguir dando clic, dirige a sitios de ventas en línea, conduce a formularios para sustraer tus datos o en su defecto para que aceptes ciertas condiciones. Generando una sensación de engaño.

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De todas las posibles intenciones de los Ceboclics, hay que tener cuidado con aquellos que te piden datos personales como económicos y crediticios, estos pueden clonar cuentas, robar o duplicar identidades, generar spam en los correo o implementar el Doxing.

Humanizando el uso de las tecnologías