Desde pequeña fui criada en una familia en la que todos leíamos mucho, y ya de grande siempre les agradecí a mis padres por haberme enseñado a disfrutar la lectura, a no verla como una obligación sino como algo que realmente nutre el alma y la vida. Uno de los errores que siempre veo es cuando de alguna manera logran que el niño relacione lectura con un castigo, y es muy fácil que eso pase. También el tema de la obligatoriedad de la lectura es importante discutirlo, se necesitan mecanismos que conviertan la lectura en algo estimulante. Creo que este tema es importante a nivel pedagógico pero también creo que cada padre tiene un gran peso de responsabilidad en la actitud que sus hijos tendrán frente a la lectura. El secreto de mis padres fue el ejemplo, siempre los veía leyendo por lo que para mí fue natural siempre leer. Buen post, sigue así.