Hola que tal? espero que estén genial, y que vivan felices y agradecidos por cada día que indudablemente representa una nueva oportunidad.

Si logramos mirar nuestra problemática con una cierta perspectiva, veremos que ciertamente, solemos ubicarnos en el papel de víctimas cuando enfrentamos situaciones de crisis en nuestra vida, preferimos buscar culpables en todas partes, evadiendo el hecho de que muchas veces nosotros estamos siendo parte del problema cuando no aportamos o buscamos una solución eficaz. Cada crisis trae consigo una lección que debemos aprender. El hecho de que existan momentos de gran inseguridad y confusión hace que las crisis nos encuentren mucho más permeables y dispuestos a aprender, ya que cuando todo va muy bien y está claro en nuestro diario vivir, nos sentimos poco dispuestos a que las situaciones de la vida nos enseñen algo, a seguir avanzando y a dar pasos de fe. 

La rutina cotidiana no supone reto de aprendizaje alguno. Sin embargo, cuando nos disponemos a descubrir caminos nuevos y desconocidos, la actitud debe ser de disposición a aprender. La necesidad de crear nuevos patrones de conducta y la eliminación de los antiguos que nos condujeron a la actual crisis nos permiten comenzar a ver cómo se filtra la luz a través de las grietas de las estructuras que creíamos inamovibles hasta el presente. Hay una frase que realmente me encanta y dice algo como "Haz de lo ordinario algo extraordinario"; es totalmente cierta, muchas veces estamos tan enfrascados en seguir un modelo de negocio, el modelo de vida que nos vende la sociedad, un modelo de estudio, que somos incapaces de ver más allá de eso, y de darle un giro rotundo, que haga todo mucho mejor y que haga que nos sintamos realmente plenos.

Cuando sientas que el rol que desempeñas en el escenario de tu vida diaria, indudablemente es el de víctima, habrá llegado el momento de realizar un profundo análisis, de hacer una pausa para examinarte y examinar la manera en la que estás caminando, en tu manera de ver el mundo y, sobre todo, de ti mismo.  Si logramos llegar al centro mismo de nuestra propia persona es porque la crisis por la que estamos atravesando intenta comunicarnos algo muy importante. Y esa comunicación puede tener que ver con nuestro cuerpo físico o con nuestro cuerpo espiritual. Muchas veces el contenido del mensaje de estas crisis es el hecho de que debemos abandonar ciertos hábitos vinculados con nuestro estilo de vida, que no nos están dando los resultados que queremos obtener. Ciertamente si el plan A no te funciona debes recurrir al plan B, pero.. ¿Cómo hacerlo si ni siquiera has pensado en la posibilidad de cambiar de planes?. Debemos atender ésto adecuadamente, para que no se conviertan en elementos que nos detengan en nuestro íntimo deseo de desenvolvimiento hacia una nueva manera de vivir y de buscar soluciones.

Quizás sea la fe, la paciencia, el uso correcto de tus habilidades, la integridad con que manejas tus negocios o estudios, la capacidad de ser bondadoso y ayudar a otras personas, realmente pueden ser muchas cosas, sólo tienes que hacerte la pregunta.

No cabe duda de que en la turbulencia, en los momentos donde no hay estabilidad  o cierta comodidad, es super necesario poder ver más allá, detrás de cada crisis hay una excelente oportunidad, tenemos que abrir nuestra mente para analizar cuidadosamente cuál es la relación costo-beneficio en la presente situación. 

A partir de hoy, mirando hacia el futuro simultáneamente con optimismo y realismo. Éstos son los retos típicos. Descubrir ese mensaje en estos momentos que enfrentamos bien sea en algún punto o etapa de nuestra vida, aceptando aquellas cosas que no podemos cambiar, pero alejándonos definitivamente del triste rol de víctimas, para comenzar a re interpretar nuestra historia y asumir nuestra responsabilidad.

Ciertamente muchas personas deciden abandonar las cosas cuando se ponen difíciles, y es que esto es un mecanismo de defensa que tenemos los seres humanos. Pero que indudablemente está en nuestro poder el controlarlo. Muchas personas se ven cegadas por el panorama, por situaciones adversas y por una gran cantidad de cosas que pueden afectar, pero sólo pocas logran reconocer las oportunidades que se afloran a raíz de estas circunstancias. 

No seas de aquellos que habla habla y habla y no aporta nada. YA HAY MUCHA GENTE ASÍ. Y te lo digo porque es algo que estoy tratando de aplicar en mi vida, no contagies tu mente de negatividad y de energías que no están bien y que no solucionan nada. Menos quejas, más soluciones y más agradecimiento.

Cada día traerá consigo su propio afán, vive al máximo, disfruta cada día y muy importante aprender a vivir en contentamiento cualquiera sea la situación. Para vivir momentos felices es importante aprender a vivir momentos de dolor, para vivir momentos de gozo, es importante vivir el duelo; para vivir momentos de abundancia es importante aprender a vivir momentos de escasez. APRENDER es la clave.