Me alegra saber que esa niña no está encadenada y fluye libre. No es negada como tantos otros infantes ahogados bajo capas y capas de aceptación y conformismo.
Me alegra saber que esa niña no está encadenada y fluye libre. No es negada como tantos otros infantes ahogados bajo capas y capas de aceptación y conformismo.
El caso es que a veces se la niega, pero no se la quiere mal, eso es cierto.