Con esta segunda parte doy por terminado todo este trabajo fotográfico que tuve la oportunidad de hacer en los primeros días de Enero. Como les dije anteriormente, estas fotos fueron producto de la casualidad ya que de la nada se encontraba el señor dueño de la moto en una esquina estacionado y pues aprovechamos.

El estilo y el posado puede que no varíe tanto y es porque contábamos con poco tiempo ya que la persona dueña de la moto tenía que irse y eso ocasionó que tuviéramos que improvisar al máximo todas las capturas que queríamos hacer.

Por suerte el resultado no fue tan desastre como lo creía en un principio, y es que cuando se está en una sesión y se empiezan a hacer fotos rápidamente tiendo a creer que algún detalle se me está escapando, por suerte no fue tan así.

Todas estas tomas recuerdo que las hice acostado en las areas verdes para poder usar las ramas que están en desenfoque y darle otro aire a las fotografías.

A veces es necesario apelar un poco a la creatividad cuando el tiempo sea muy justo para que así el resultado final no sea tan monótono.