Esta parte:
Quiero deshacerme de estos sentimientos malos que han florecido en mí. El dolor y la frustración han logrado dañarme, hacerme sentir pequeña y tonta. Pero a pesar de eso sigo deseando.
Es tan real para mi, pues aveces lo amargo de la vida intenta contaminarnos a tal punto, que ya dejamos de soñar, de desear, pero también es esperanzador mostrar que a pesar de las penurias nuestro corazón intenta renovarnos para luchar por ideales olvidados o para trazar nuevos caminos con destinos mas apremiantes. Un gusto leerte saludos
Muchísimas gracias. Me encanta tu comentario. Gracias por leerme :)