RE: Debate Cervantil // ¿Ejercer el voto?
La acumulación de poder y la centralización generan corrupción
¿Realmente vale la pena ejercer el voto? Absolutamente no bajo el paradigma vigente.
La representación que concedemos a los políticos para actúen en nuestro nombre es una ilusión. La acumulación de poder, la jerarquía y la centralización generan corrupción y hacen que las élites políticas se vayan alejando cada vez más de quienes supuestamente representan. En otras palabras, conforme crece la pirámide de la jerarquía, su cúspide –conformada por las élites políticas– se va alejando de la base –conformada por los ciudadanos comunes–, en este escenario la representatividad se va diluyendo. Al final, los políticos que soy elegidos a través de la votación popular defienden intereses particulares y partidistas en lugar de ocuparse de los intereses comunes.
Mafias legitimidas y legalizadas
Por otro lado, los partidos y grupos políticos actúan como mafias que se disputan el monopolio de la violencia sobre un territorio determinado, lo único que los diferencia de las mafias ilegales es que gozan de la protección y de la legitimación de la ley que es hecha por ellos mismos a su medida. Nos hacen creer que los ciudadanos somos dueños de nuestro destino por medio del ejercicio de la democracia, cuando en realidad tenemos el "derecho" de elegir a nuestros victimarios y verdugos cada 4, 5, 6, 10 años.
La cesión de la soberanía individual
¿Esta realidad es culpa de los políticos? Desde luego que no. Es absoluta responsabilidad de los ciudadanos quienes no votamos responsablemente y elegimos a gente que no está preparada para ejercer cargos políticos y que, de la misma manera, no tienen valores ni principios republicanos que son: el imperio de la ley, la justicia y la igualdad ante la ley. Esto quiere decir que nadie está por encima de la ley, ni siquiera quienes la elaboran y promulgan, ellos deben respetarla tanto o más que los comunes. El papel aguanta todo, en la práctica sabemos que las verdaderas repúblicas están en peligro de extinción. Están siendo reemplazadas por tiranías legitimadas por procesos democráticos que, en muchos casos, son fraudulentos. El caso más patético: Venezuela. La democracia se ha convertido en un instrumento de extorsión en el que los ciudadanos nos hemos visto forzados a ir cediendo paulatinamente nuestra soberanía personal en favor de los políticos y del hipotético "bien común".
Blockchain como una herramienta de confianza
Una de las grandes innovaciones de la cadena de bloques es que permite el surgimiento de un nuevo paradigma en el que el poder puede ser distribuido con el fin de que la representación se ejerza de verdad. Esto significa que podría ayudar a modificar el paradigma vigente de la centralización del poder en favor de un nuevo modelo de gobernanza distribuido, al antítesis de la centralización. Si bien es cierto, la tecnología de la cadena de bloques es superior a la tecnología actual de bases de datos centralizadas que se utilizan para el conteo de votos, no es menos cierto que los políticos no permitirían la implementación de blockchain con el fin de realizar elecciones más transparentes y verificables públicamente en tiempo real porque simplemente no les conviene. Como he mencionado antes, todo esto se trata de una disputa constante sobre el monopolio del poder y la violencia, los grupos políticos no estarían dispuestos a ceder la oportunidad de gobernar en nombre de la confianza, transparencia y honestidad que la cadena de bloques concedería a un proceso electoral.
Por el bien de la humanidad, espero que, en algún momento, se pueda utilizar la tecnología de la cadena de bloques para este y muchos otros ámbitos donde la confianza se ha visto seriamente lesionada.