Puedo tener un mal día, pero mientras ella esté conmigo todo está bien.

A veces, por no decir siempre, no valoramos a muchas personas incluso momentos, por estar aferrados a ideas que no nos hace bien, rencores del pasado e incluso por celos. Queremos creer la idea que alguien no nos quiere, que solo nos utiliza cuando nos necesita, cosas que pensamos porque esta persona no nos da la atención que nosotros queremos y muchísimas veces necesitamos.

Nos alejamos, nos preguntamos una y otra vez ''¿Por qué no me quiere?'' ''¿Por qué no me hace caso?'', lloramos, gritamos en silencio, y nos quedamos esperando que algo suceda, que algo cambie nuestra situación. Entregamos todo a esa persona y más, pero siempre ella va a prestarle más atención a aquella personita que se ha robado tu lugar, se robo el cariño que era para ti, se robo el amor que ella debeía de entregarte a ti; y no solo eso, también se robo la atención de todos a tu alrededor.

Pero un día dejas de luchar y de estar triste e intentas aceptar que tiene años siendo así, y que si no cambio antes menos ahorita, y vuelves a su lado, lo entregas todo, la amas, la apoyas, cuando ella lo necesita la apoyas; porque de eso se trata de estar siempre con ella, con tu mamá, porque puedes tener un mal día, pero mientras ella esté contigo, a tu lado, todo está bien.