Ciertamente cómo aportar un arte que sea capaz de ser reflexivo y no un fetiche o una estetización de la violencia humana a través de la mediación del arte. Claro la fotografía genera muchos conflictos por su cercanía a una aparente realidad, pero por ejemplo la pintura en tiempos específicos también se ha valido de esto. La cosa es que más allá de esos artista que estaban permeados por una forma e inclusive una filosofia según su contexto, hoy nos queda esta generación pensarnos en que otras posibiladas hay de mediación con el arte, entendiendo que es un circuito que también tiene históricamente un papel politico y económico. Saludos