La Vida es tan complicada y a la vez tan fácil de definir. Puede ser tan fugaz y tan extensa. La percepción de ella es tan diversa como los pensamientos o sentimientos. Entretejida de impresiones, algunas intensas que llamamos recuerdos y otras más sutiles que catalogamos como sentido común. La Vida es en sí su propósito. La razón de la existencia por develar. Dotados de discernimiento podemos meditar en lo permanente y lo perecedero en ella, más allá del mero concepto de nacer, crecer, reproducirse y morir. Saludos de corazón.