Jardins du Manoir d’Eyrignac - Francia
Este verano tuvimos la ocasión de visitar uno de los jardines más conocidos del sur de Francia: Les Jardins du Manoir d’Eyrignac. Están situados junto a la población de Sarlat (en la región francesa del Perigord) y se consideran una visita obligada para todo amante del paisajismo que visite el sur de Francia. La visita permite adentrarse en los jardines de una propiedad privada que ha pasado de generación en generación durante los últimos tres siglos dejando constancia en su diseño de las modas paisajistas de cada momento.
La mansión principal forma parte de la lista de edificios históricos de Francia. Se construyó en el siglo XVII aunque los primeros jardines no se construyeron hasta el siglo XVIII. En el diseño inicial de los jardines se aplicó el estilo francés de la época pero a mediados del siglo XIX fueron remodelados y adaptados a la moda de la época: el estilo inglés (parterres, arte topiario y visuales dirigidas hacia puntos concretos). Además, durante el siglo XVIII se incluyeron algunos elementos chinos que en aquel momento se pusieron de moda y que aún hoy perduran, como pérgolas, bancos y arcos.
En la gran remodelación que tuyo lugar a finales del siglo pasado se buscaron y resaltaron todos los elementos originales: fuentes, escaleras, maceteros, esculturas y se consiguió convertirlo en una verdadera obra de arte abierto al público. El arte topiario se usó como principal herramienta para crear volúmenes y así poder dirigir la mirada hacia puntos concreto creando diferentes escenarios repartidos por todo el recinto.
Les Jardins du Manoir d’Eyrignac están formados por siete jardines independientes conectados entre sí de manera armoniosa. La transición entre uno y otro es suave y elegante. De hecho, durante la visita, cuesta ser consciente de dónde se sitúan los límites de cada uno de los jardines.
Jardín de las esculturas vegetales
El recorrido comienza en el jardín de las esculturas vegetales en el que el arte topiario es el protagonista dando volúmenes y perspectiva a a toda la superficie. Con el boj recortado se consigue enmarcar un camino de césped no transitable (Allée des Charmes) que nos llevaría a los parterres y la escultura de piedra del Jardín Francés (situado a continuación).
Esculturas vegetales Foto @nuriampascual flickr.com/nuriamp
En la fotografía que os mostramos no se aprecia el delicado trabajo de jardinería que hay detrás de esta composición, ya que cuando lo visitamos el pasado verano, los arbustos aún no se habían recortado y las figuras no tenían sus formas bien definidas.
Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
Junto a esta área se encuentra la zona denominada Chambre de Verdure et Allée des Vases y les Arcades néogothiques anglaises. Esta zona transitable está enmarcada por boj recortado y grandes jarrones de barro del siglo XVIII. Los arcos neogóticos de madera (instalados en el siglo XIX) nos acompañan durante parte del recorrido.
Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
El Jardín francés
El jardín francés, formado principalmente por parterres simétricos, fue el primero en construirse a mediados del siglo XVII, justo delante de la mansión. En este jardín se da protagonismo a las flores de color blanco y azul que combinan a la perfección con los verdes brillantes del césped y del boj. Los cipreses y los muros de piedra del fondo enmarcan todo el diseño dando una perspectiva que ayuda a enlazarlo con el resto de los jardines.
Jardín francés Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
Vista desde el Jardín francés. Al fondo, L’Allée des Charmes Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
La mansión de Arbatan
Esta mansión no ha dejado de estar habitada desde mediados del siglo XVII y es uno de los principales puntos de interés de los jardines. Desde la mansión de Arbatan se accede al jardín francés por unas escaleras de piedra pasando junto a unos setos perfectamente recortados.
Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
La pagoda china
La pagoda china está situada al final del camino que forma la prolongación del Allée des Charmes. Se encuentra al final de un bosque de robles centenarios que sombrean todo el conjunto. La incorporación de esta pagoda es consecuencia de la moda de incluir elementos chinos en los jardines privados que se instauró en Europa en el siglo XVIII. De hecho, esta pagoda no es el único representante de la moda china. En el resto del jardín hay bancos y arcos originales chinos que dan un toque de color rojo al jardín.
El jardín florista y el huerto
En uno de los laterales, junto a un camino bordeado de cedros llorones, se encuentra una de las zonas más desconectada del resto del jardín: Le Jardin Fleuriste et le Jardin Potager. Estos jardines están pensados para que se consideren un simple anexo del resto del jardín más que una continuación natural del conjunto del diseño. Fueron creados con el simple propósito de surtir de vegetales y de ramos de flores a la mansión.
Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
El jardín blanco
El principal protagonista de este jardín es el agua y las flores de color blanco (rosas blancas, surfinias, bulbosas,…). Los caminos están enmarcados por parterres y nos conducen a una fuente central en la que hay cuatro surtidores de agua. El perímetro lo cierran enredaderas y rosales con rosas de color blanco. En los miradores hay bancos y pérgolas chinas fruto de la moda enteriormente comentada.
Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
Foto @nuriampascual flickr.com/nuria
Conclusión. ¿Merece la pena la visita?
Sí, sin duda, merece mucho la pena. Es cierto que Les Jardins du Manoir d’Eyrignac no se encuentran cerca de una gran ciudad y esto no ayuda a que sean accesibles (están situados en zona rural a unas 2-3 horas en coche al norte de Toulouse, Francia). Pero el hecho de que esté situado en la región del Perigord (una de las zonas turísticas más famosas del sur de Francia) hace de esta visita un complemento perfecto para unas vacaciones inolvidables en esta región francesa.
Que belleza Nuriam, muy bellas fotografías, mi favorita es la octava, tremendo paisaje que tuviste la oportunidad de conocer en Francia, algún día espero poder viajar por el mundo, es un sueño que espero cumplir. Gracias por compartir. ¡Saludos y buenas vibras, muy buenas fotografías!.
¡Gracias! Francia tiene unes jardines históricos preciosos que recomiendo visitar a cualquier amante de la jardinería y el paisajismo.
Espero poder verlos en vivo algún día. ¡Buen contenido! y me gustó mucho el logo de la primera fotografía.