La Visita Indeseada. Cuento

in #spanish3 years ago

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CIUDAD BOLÍVAR CASCO HISTÓRICO: FOTO DEL AUTOR

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Mario iba caminando de manera pausada, bajo el sol inclemente de Ciudad Bolívar, caminaba por el casco histórico de la ciudad ya que iba a la casa de una amiga de la familia para hacerle un favor, pero a pesar del calor y el sol, Mario estaba disfrutando del paisaje, de los colores de las viejas casas coloniales, de la forma de los árboles que daban sombra y pensó en la arquitectura divina, que Dios coloca en la naturaleza y que la mayoría de las personas ignoran por estar corriendo en el día a día.

Mario, se río para sus adentros y pensó, la verdad que yo antes era igual que el resto del mundo, no disfrutaba de las cosas sencillas de la vida, no veía más allá de lo que tenía al frente, sólo pensaba en lo que no tenía, en lo que deseaba, nunca me detenía a observar, no me fijaba en el paisaje, en la creatividad de las personas para usar las enormes piedras como cimientos para su casa, en el maravilloso mosaico que formaban las calles de piedra de casco histórico de la ciudad, no disfrutaba de la majestuosidad del Orinoco, tampoco daba las gracias por algo tan simple como respirar un aíre tan puro y limpio, como el que a diario respiro. Se sonrió de nuevo para sus adentros y se dijo así mismo, cuanto le debo a don Gonzalo, cuánto me ha enseñado ese viejo querido.

-Buenos días Mario, te estaba esperando-

-¿Cómo está señora Susana?, le aseguré que venía hoy a ver lo del internet-

¡Ay, vale, no sabes cuánto te lo agradezco!

-Ese aparato se quedó sin mover las luces después del bajón de luz, y es como me dijiste la otra vez, si las lucecitas no titilan, no hay corriente y no puedo llamar a mi Francisco por el Whatsapp.-

-No se preocupe señora Susana, eso es cuestión de reiniciar el aparato y el peor de los casos habrá que configurar de nuevo el modem.-

-Bueno, mientras tú jurungas el aparato ése y lo arreglas, yo voy a hacer un cafecito-

Francisco el hijo de la señora Susana es Ingeniero Eléctrico, y fue uno de los tantos profesionales que salieron de Venezuela con la crisis económica y política, antes de la gran diáspora venezolana.

-Y cómo está Francisco señora Susana -

-Bien hijo, allá en Noruega pasando frío, ahora tiene una novia, esa muchacha no habla nada de español, Francisco le está enseñando, pero no se le entiende nadita vale, yo le dije que la trajera a Bolívar, pa’ que le dé sapoara y así se queden los dos aquí conmigo -.

¿Mario y cómo te fue en Caracas?

-Muy bien señora Susana, fui por dos días para ver lo de la pasantía y me quedé dos semanas, la verdad que la pasé muy bien, llegué ayer como 3 horas antes de que me llamara usted-

-Mario, no sabes lo de Virginia, la esposa del señor Gonzalo-

-No señora Susana, vengo llegando no lo he visitado, ni lo he llamado, ¿Qué pasó?

-Virginia murió de Covid, dicen algunas personas, pero yo no creo fue de un momento a otro, harán 8 días que la enterramos -

La noticia le cayó a Mario como un martillazo en un dedo, pensó en Gonzalo, él tenía 40 años de casado con la señora Virginia y sus hijos vivían uno fuera del país y los otros dos en otras ciudades.

Mario estaba preocupado por Gonzalo, se decía a lo interno ¿Cómo estará Don Gonzalo, cómo se sentirá, estará sólo en estos momentos, se habrá ido con uno de sus hijos?

-Mario, aquí está el café – Interrumpiendo los pensamientos que tenía Mario en ese momento.

-Muchas gracias señora Susana, ya está listo lo del modem, era sólo cuestión de reiniciarlo -

-Gracias Mario, Dios te lo pague -

-No se preocupe señora Susana, estamos a la orden -

¿Me permite su teléfono para hacer una llamada y me disculpa la molestia señora Susana?

-No es molestia ahí está -

Mario, llamó a la casa de Gonzalo, preguntándose si el viejo estaría en su casa, el teléfono repico en varias ocasiones y cerca de la cuarta vez cuando ya Mario iba a colgar la llamada se escucho del otro lado de la línea.

-A la orden-

-Buenas tardes Don Gonzalo, es Mario, ¿Cómo está usted?

-Muy bien Mario, lindo y bello como un osezno. ¿Y tú cómo estás, me dijeron que estabas en Caracas para lo de la pasantía de la universidad?

-Si llegué ayer, todo salió bien. ¿Don Gonzalo lo puedo ir a visitar? -

-Claro Mario, cuando quieras, vente te espero-

Mario se despidió de la señora Susana y se encaminó a la casa del viejo Gonzalo.

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Mientras Mario caminaba a su destino, pensaba en Gonzalo, en el cómo estaría y se sentiría, le extrañó que le saliera con un juego de palabras cuando lo llamo, y se dijo, será por costumbre, no debe estar de buen humos, debe estar muy triste el pobre viejo.

En el camino Mario se paró en una panadería y compró pan de guayaba y un par de duces de leche, para compartir, no compró nada de beber, ya que en casa de Gonzalo siempre la señora Virginia preparaba jugos naturales. Pero después de unos pasos se dijo así mismo, pero ahora la señora Virginia no está.

Pero por alguna razón, siguió caminando hacia la casa de Gonzalo, lo que sí es que ahora estaba recordando las cosas que le había enseñado Gonzalo, cuando Mario conoció a Gonzalo estaba pasando por una crisis personal espantosa, tenía problemas en su casa, con la novia en la universidad, se sentía insatisfecho de la vida, sentía que nada de lo que hacía tenía importancia y que la vida no valía nada.

Por un lado, se sentía mal por no poder acceder a las cosas materiales que quería, cuando quería y cómo quería, pensaba que no tenía futuro, que los políticos le habían robado todo y sentía un gran odio por dentro, contra todo y contra todos, sentía que la vida era un castigo. En fin estaba en una enorme crisis existencial.

Y fue en medio de esa crisis personal tremenda, que conoció a Gonzalo, haciendo una cola para comprar comida, en uno de los momentos más duros de la crisis económica y política del país.

Mientras todo el mundo hablaba en la cola de tumbar al gobierno, de acabar con un sector u otro de la sociedad, ahí estaba él Gonzalo, viendo a unos pájaros en un árbol, recuerdo que me quedé pasmado cuando en la cola le pregunté, ¿Qué piensa usted de esta situación señor, no le parece invivible, miserable y espantosa?

Él se volteo y me miro, y me dijo algo así como, hijo el país y la situación no son invivibles, de hecho estamos acá usted y yo jovencito y estamos vivos, ahora bien, debes entender que lo que hace un lugar inhóspito para la vida es la actitud de las personas ante la vida y a eso le debes sumar la aptitud díscola y violenta de algunas personas en contra de sus semejantes.

Muchacho no lo digo por molestar, pero debes entender que las situaciones políticas pasan, los gobernantes pasan, las guerras pasan, las enfermedades pasan, y nosotros no podemos evitar que esas cosas pasen, pero lo que si podemos hacer, y nadie nos puede quitar ese derecho, es el como enfrentar y vivir las situaciones.

Te pongo un ejemplo, te molestes o no, maldigas al presidente o al líder la oposición o no, insultes o no al que piense diferente a ti, vas a tener que hacer igual esta cola para poder comprar comida más económica y poder llevar comida a tú casa. Eso no lo podemos cambiar.

Pero lo que si podemos cambiar es la forma en que asumimos las situaciones, tú lo estás haciendo insultando y despotricando contra Dios y el mundo, cómo si fueses la única víctima de esta situación, te llenas de odio y expulsas ese odio y ese resentimiento cuando hablas y mucha gente hace lo mismo, eso no te va a traer nada bueno y no hablo sólo de las energías, hablo de cosas concretas, esa actitud ante la vida te va a traer problemas de salud, malestar emocional y más. Y la forma en que tratas a los que piensan diferente a ti, te puede traer peleas e insultos, ya que la gente te va a responder al mismo nivel en que la tratas. En fin tú te dejas y ellos a su vez se dejan llevar por el ego y los instintos más básicos del hombre y actúan con violencia física o verbal en automático y así no se puede vivir la vida.

A diferencia tuya, yo sé que hay un problema, entiendo que estamos pasando por una situación muy dura e inusual, pero prefiero pasar el tiempo que tengo pasar en esta cola al igual que tú, haciendo algo constructivo, como leer un libro, ver y disfrutar la creación de Dios a través de la naturaleza y hasta me gustaría tener un compañero en las colas con quien conversar y tener diálogos de altura y quien quita hasta jugar ajedrez.

Dado que no voy a contaminar mi alma y mi espíritu, ni tampoco quiero caer en un nivel tan básico de consciencia, donde en vez de actuar como un ser humano adulto y responsable, actúe por instinto.

Así fue mi primer encuentro con Gonzalo, después de ese encuentro, nos reuníamos para hacer las colas juntos y comenzamos a fraguar una amistad enorme. Gonzalo, me prestó libros, me enseño de filosofía, de espiritualidad, a cultivar la paciencia, a someter mi ego, a jugar ajedrez, en fin me ayudó a crecer mucho como persona y me ayudo a ser un mejor ser humano, situación que agradecen mi madre, mi hermano, lo vecinos y mis compañeros de estudio además de mí.

La verdad es que cuando veo lo que era y lo que soy ahora, reconozco un gran cambio de carácter y en mis intereses de vida.

Pero ahora es Gonzalo, el querido viejo que tanto me enseñó y me ayudó el que me necesita.

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PUENTE DE ANGOSTURA. VISTA DESDE EL CASCO HISTÓRICO DE CIUDAD BOLÍVAR: FOTO DEL AUTOR

¿Cómo estará, qué podré hacer por él?. Bueno ya pronto lo averiguaremos ya estamos a la puerta de su casa.

Antes de tocar la puerta, Mario, hizo una pequeña oración a su manera como siempre lo hacía, la cuál decía así: “Señor mío y padre eterno, dame fuerza para ser la columna que necesita mi amigo y maestro y dame la sabiduría para tener las palabras adecuadas con él, te lo pido padre eterno, que le das vida a los mundos. Así sea” Y tocó el timbre de la casa.

Al abrirse la puerta Mario vio a un Gonzalo, entero, tranquilo, pleno lleno de vida y de alegría como siempre, el cual lo invitó a entrar a la casa, lo cual hizo Mario, pero no sin sentirse sorprendido ante la entereza de su amigo y maestro.

-Cómo estás Mario, bienvenido, siéntate, demás está decir que estás en tú casa. -

-Muchas gracias, me enteré de lo señora Virginia y vine apenas pude, lo lamento mucho. -

-¡Ay vale, yo también!, no te imaginas cómo la extraño físicamente, ya que espiritualmente está aquí con nosotros, ella está en cada mueble, en cada taza, en cada vaso, en cada espacio y en mis recuerdos. -

-¿Cómo te fue en Caracas Mario con lo de la pasantía?

-Muy bien, logré todas las metas propuestas y además tengo el visto bueno de la empresa para iniciar en marzo del año que viene, con la posibilidad de quedarme si tengo un buen desempeño.-

-A estoy seguro que lo vas a tener, así que espero pasar tiempo de calidad contigo antes de que te vayas a la gran ciudad, jajaja.-

-Perdóneme Don Gonzalo pero no entiendo.-

- ¿Qué no entiendes Mario? Por cierto trajiste dulce de leche verdad, dame un pedazo mientras conversamos.-

-Tome, por cierto además del dulce de leche hay pan de guayaba. -

-Que bueno yo hice chicha de arroz, ¿Quieres?

-Claro-

-Dime Mario, qué es lo que no entiendes hijo. -

-Es que pensé que estaría destruido, contra el suelo, sufriendo su pérdida.-

Gonzalo sirvió los vasos con chicha y además llevó una jarra con mas chicha y hielo.

Miró fijamente a Mario y le dijo, - ella era católica practicante, de hecho murió de un paro cardíaco mientras dormía el día lunes, un día después de venir de misa-

Lo sé Don Gonzalo, yo soy católico también y la vi en varias ocasiones que fui a misa. Pero a veces dudo de la sabiduría de Dios, como se lleva a una persona como la señora Virginia y deja a gente mala, como permite las pandemias, las guerras y todas las cosas que de una u otra manera nos afectan como sociedad.

-A ver Mario, te cuento, tanto para Virginia, como para mí la muerte no es el final, es sólo el principio de otro camino, lo único que lamento es que no lo hayamos iniciado juntos, pero para nosotros la muerte es un renacer, no el final del camino. Mis hijos lo aceptaron cuando se los comenté, pero no lo entendieron.

-Yo, tampoco lo entiendo en realidad.-

-Lo sé Mario, eso se debe a que crees, pero no tienes fe. El problema es que tratas de entender a Dios y sus designios con la lógica. Ojo la lógica no es mala, menos en una carrera de matemático como la tuya, sin embargo, la lógica tiene un límite, al igual que las creencias, además las creencias normalmente se basan en ideologías vacías o erradas y no en certezas, por eso las creencias son tan peligrosas, a todo nivel, y su peligro radica en que la creencia es la madre del fanatismo y los vicios, de hecho todos los grandes criminales de la historia hacen un “Mea Culpa” diciendo yo creía.

Por eso la fe, que para muchos es fuerza espiritual, no se basa en las creencias, sino en la certeza y yo tengo fe en que la muerte no es el final del camino, ya que tengo la certeza de que eso es un hecho.

Del mismo modo creo en Dios, o en algo superior espiritualmente que nos une a todos, santos y pecadores, buenos y malos en una sola consciencia cósmica, que para algunos recibe el nombre de Dios, para otros Mahoma, para otros el Eterno, Hashem o el Gran Arquitecto del Universo, pero es ALGO superior a nosotros que nos une y que nos muestra el camino cuando logramos acceder a él.

Ojo, ni siquiera sé si la concepción que tenemos en occidente o la del oriente, es la verdadera concepción de lo que llamamos Dios y tampoco sé, si esa concepción es el fin en sí mismo, o es la visión que se nos da, para poder acercarnos a esa realidad espiritual superior con nuestro limitado intelecto y con nuestra limitada visión de lo espiritual.

Por lo que no sé, si esa visión de Dios que tenemos o que creemos conocer es un fin en si mismo, o sólo es parte de una realidad, para alcanzar un nivel de consciencia más alto, para después poder continuar el camino, no lo sé, tal vez Dios sea el infinito, el todo y la nada.

-No lo entiendo don Gonzalo, cómo creer en algo de lo que no se tiene un conocimiento real y concreto. -

-A ver, la última vez que nos vimos me dijiste que estabas enamorado de María, que no podías estar sin ella y de hecho te quedaste en Caracas más tiempo del debido, inclusive sin venir al aniversario de tus padres para estar con ella, ¿Cierto?

-Bueno, si es así, ¿Pero que tiene que ver lo que yo siento por María con lo que estamos conversando, de Dios y la muerte?.

-A ver Mario, explícame con fundamento y basamento teórico lo que sientes por María y define lo que es el amor que sientes por ella, no me expliques defínelo como una ecuación matemática, por favor.-

-Bueno, yo, no sé, es decir, no puedo, no tengo palabras, es que no sé cómo definir lo que siento, sólo sé que lo siento.-

-Entiendo. No puedes definir el amor, no puedes definir lo que sientes por ella, o decir el porqué es tan importante que dejaste a tú familia de lado en un momento especial para ellos. Pero dime acaso te suena lógico lo que me dices, por favor contesta, ¿Realmente te parece lógico?.

-No, realmente no.

-Entonces yo creo que no la amas, creo es sólo un capricho de muchacho.

Mario se quedó pasmado viendo a su maestro, el cual terminó riendo al ver la cara del muchacho.

-Te lo explico de esta manera, el amor es indefinible, ya que nadie lo puede definir sólo se experimenta y las personas hacen cosas maravillosas y buenas por amor, ya sea amor a una mujer, a un hijo, a los niños, a los estudiantes, en fin los actos y los sacrificios de amor son maravillosos y hay ejemplos de eso en la historia.

Siendo así, espero que entiendas que así como no se puede definir al amor, tampoco se puede definir a Dios o al Eterno.

Sólo lo experimentamos, pero una vez que lo experimentamos y lo conocemos sabemos que está ahí, que existe, que no es un cuento libertario, ni una invención, él es porqué es, al igual que lo es el amor.

Fíjate otro detalle, cuando hablas de los que sientes por María, dices yo amo a María, no dices yo creo que amo a María, esa es la diferencia entre la fe y la creencia, la certeza y la certeza sólo la da la experiencia real de vida espiritual en este caso.

Cuando no hay certeza y tratas de entender sólo con la lógica, viene la creencia y el fanatismo, ya que tú lógica te dice que eres mejor que el otro y esa lógica viene acompañada de un gran ego, y logras movilizar a las masas con tu léxico y tú retorica, vas a crear guerras, cruzadas, genocidios y demás desastres, basados en una creencia y sostenidos por una lógica creada ya adecuada para esa creencia.

Por eso es muy importante ser hombre y mujeres libres y de buenas costumbres, libres pensadores, que cuestionen, que investiguen, aprendan y experimenten, sólo así se llegará al conocimiento que está más allá de la lógica y nos permitirá un verdadero acercamiento a Dios o como lo queramos llamar.

-Entonces Don Gonzalo, ¿Usted cree que todas las guerras y atrocidades, religiosas, políticas y económicas de la historia se basan en el fanatismo y la manipulación de las masas?

-Tengo la certeza mi querido Mario de que es así, Hitler creía en lo que pregonaba y convenció a un pueblo culto como lo es alemán a creer en lo que el creía, una vez que la mayoría creo y aceptó lo que él decía, acabar con los que pensaban diferente a él, no fue una tarea difícil, lo mismo se puede decir de Stalín, de las Cruzadas y pare de contar.

Para terminar con los ejemplos, sólo te diré, recuerda el cómo y en dónde nos conocimos y recuerda todo el odio y el resentimiento que tenías dentro de ti en ese momento, recuerda cuanta gente estaba en la misma situación que tú, recuerda lo que sucedió cuando todo ese odio y resentimiento se encauzó en las “Gaurimbas” recuerda todo el dolor que trajo, estuvimos a pasos cortos de una guerra civil y de hecho hubo violencia entre hermanos, mientras los líderes de ambos bandos políticos, bebían, comían y observaban los acontecimientos por televisión, acusándose a unos y a otros y ahora se dan la mano. Sin que les importe todo el dolor que causaron y hablo de ambos bandos.

Es decir, ambos bandos políticos, manejaron a las masas a través de las creencias y manipulación. Y finalmente y sin meterme en política, ya que no me interesa, sólo puedo decir que en el fondo ambos lados son iguales, sólo quedaría ver cuál es el menos malo, si es que alguién le interesa hacer ejercicio, claro.

-En fin mi querido Mario para terminar esta tertulia y empezar con el ajedrez, te diré lo siguiente, extraño y mucho a mi Virginia, ella recibió una visita indeseada, que nos va a tocar a todos y a cada uno de nosotros, ya que la muerte es un hecho natural en todos los seres que habitamos en este planeta.

Lo que si es que dependiendo de nuestras experiencias de vida, de nuestras certezas, o de nuestras creencias, enfrentaremos la experiencia de la muerte de manera diferente.

Yo, para terminar el punto, te digo quela enfrentaré con la certeza de que pronto, cuando renazca estaré de nuevo con ella, mí Virginia, ya sea en otro plano o unidos en esa consciencia universal que llamamos Dios.

-Don Gonzalo esta vez le tocan las negras -

-Así es mi querido, a ti te tocan las blancas, y no hablemos más de la visitante indeseada, no sea que nos toque la puerta antes de terminar la partida.

Ambos rieron a la vez e iniciaron la partida.

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