¿Han escuchado sobre Viktor Frankl?

in #spanish7 years ago

Viktor Emil Frankl (26 de marzo de 1905, Viena, Austria-2 de septiembre de 1997) fue un neurólogo y psiquiatra austriaco, fundador de la logoterapia. Sobrevivió desde 1942 hasta 1945 en varios campos de concentración nazis, incluidos Auschwitz y Dachau…

Bla bla bla… pero vamos al punto:

“Todo puede serle arrebatado a un hombre, menos la última de las libertades humanas: el elegir su actitud en una serie dada de circunstancias, de elegir su propio camino. ¿No podemos cambiar la situación? Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento”.

Una conclusión profunda, ¿cierto? Para una persona como yo, que está absolutamente de acuerdo con el hecho de que los sentimientos no se pueden evitar, esta afirmación representa un choque filosófico colosal. Recuerdo que la primera vez que escuché sobre este hombre en la charla psicoeducativa en la unidad de psiquiatría sentí rencor. Y ahora no vienen a mi mente, pero tengo vagas memorias sobre la tonelada de excusas que usé para contrarrestar su argumento, expresado por el médico psiquiatra quien intentaba darle consuelo a todos los locos y no tan locos presentes en la sala. De eso hace un tiempo; un año, tal vez dos.

Hoy en fisiología, al inicio de su última clase, uno de los profesores (son varios) se metió a filósofo antes de comenzar con el funcionamiento del sistema digestivo y nos dejó esta frase: “la costumbre nos hace vivir en una jaula aun sabiendo que la puerta está abierta”. No recuerdo quién es el autor y sinceramente no me interesaba demasiado, pero en medio de la perorata la relacionó con Viktor Frankl y su enseñanza de libertad y en ese momento entendí el significado real de “ver las cosas bajo una luz distinta”.

La yo de aproximadamente uno o dos años, enojada con la vida, con el mundo, con la gente, no podía entender cómo alguien podía siquiera concebir la idea de estar bien cuando se está mal, ¡qué puedes decidir! Eso me parecía aberrante; para mí, incluso ahora, lo que se siente se siente, los sentimientos no se pueden evitar. Están ahí, vienen de forma espontánea, nadie los invita, ellos irrumpen en tu vida y hacen de ella lo que les da la gana. Cuando escuché, al final de la charla y después de todas las frases motivacionales y de “psicología barata”, que este hombre había estado inmerso en los campos de concentración, que allí había perdido toda su familia y que había quedado solo… cuando la doctora acotó que a pesar de que en su vida no había quedado ningún sentido, él tuvo la libertad de decidir; Me rebelé, me enojé, sentí que se burlaba de las personas como yo, ahí sentadas, sufriendo lo irrazonable, con nada relevantemente doloroso que contar, pero aun así deprimidos y desmotivados. En mi mente se abrió paso la idea de que no debíamos compararnos con los otros; una excusa más.

Hoy me di cuenta de que Viktor Frankl jamás salió de mi mente, hoy al escuchar al profesor preguntar si estábamos acostumbrados a algo…

Me di cuenta de que estaba acostumbrada a la idea de que había nacido para sufrir por cosas insignificantes. Me di cuenta de que mi ansiedad y mi depresión más que enfermedades neuróticas eran una costumbre. Y yo no quería salir de ellas aunque la puerta estaba abierta.

¿Qué nos hace vivir en una jaula aun cuando la puerta está abierta?

La costumbre. La costumbre de quejarnos de todo, la costumbre de sufrir, la costumbre estar solos o acompañados. La costumbre de no salir de nuestra zona de confort. La costumbre de no decidir la actitud con la que queremos a afrontar las situaciones porque si nos dejamos llevar por la corriente todo es mucho más sencillo. Tengo una razón para victimizarme y no hacer nada al respecto. Tengo miedo de reconocer que en todo este tiempo me he estado equivocando y tropezando con la misma piedra una y otra vez. Miedo de descubrir que nada me sale bien porque yo decido sufrir los hechos y no por los hechos en sí. Tengo miedo de la libertad. Miedo de reconocer que soy el escritor inalienable de mi propia historia, aunque los argumentos estén dados por la vida y no por mí.

Hoy me di cuenta de que no quiero seguir en la jaula. No quiero seguir quejándome. Me di cuenta de que quiero ver todo desde otra perspectiva; la perspectiva que yo decida darle. Me di cuenta de que estoy cansada de dejarme vencer por las adversidades que tiene la vida mientras culpo a una especie de enfermedad psicofisiológica y no hago nada para remediarlo.

Hoy quiero decirle a mis sentimientos exagerados y obsesivos “basta”. No van a derrumbarme más. Hoy, o tal vez desde hace tiempo sin darme cuenta, decido que yo soy responsable de mí. No soy responsable de los sentimientos que pueda tener, pero sí del impacto que puedan tener sobre mi vida.

Viktor Frankl es una especie de héroe, una persona increíble que las personas como yo no pueden menos que envidiar. Era envidia lo que sentí ese día. Él tenía razón. No puedes evitar sentir el dolor, pero puedes decidir que el sufrimiento no va a dominarte. Porque quieres seguir viviendo por sobre todas las cosas. Hoy descubrí que la vida de Viktor Frankl sí tenía sentido, después de todo el dolor que tuvo que pasar, su sentido era seguir viviendo, quería seguir viviendo porque decidió que era él, y no unos psicópatas hijos de puta, el único que tenía derecho sobre su propia vida. Aunque le quitaron todo, absolutamente todo, nunca le quitaron la libertad de decidir que quería seguir viviendo. Y quería vivir con una actitud que valiera la pena. No tiene ningún sentido vivir entre quejas y constantes depresiones, si vas a vivir para sufrir, entonces la muerte es mejor.

Quiero vivir feliz, siempre dueña de mi propia voluntad. Siempre dueña de mí.

Gracias Viktor Frankl.

Sort:  

Hola @ritarivero, upv0t3
Este es un servicio gratuito para nuevos usuarios de steemit, para apoyarlos y motivarlos a seguir generando contenido de valor para la comunidad.
<3 Este es un corazón, o un helado, tu eliges .

: )


N0. R4ND0M:
3299 6262 3092 4503
2450 8443 7424 4749
2689 3889 6745 6345
8209 9296 4527 1328