Saludos nuevamente @decomoescribir y demás amigas (os), me disculpo por el atraso de un día. Cuando uno lee cosas como esta de Borges o de cualquier figura de renombre, queda con la sensación de que, como son argumentos inobjetables, debemos seguir su ejemplo y hacer las cosas como dicen ellos. Si seguimos hurgando en otros escritores, no obstante, veremos que prefieren la novela al cuento corto y además con muy buenos argumentos también. Entonces, nos dan ganas de dejar tranquila la idea del cuento y emprender la ruta de una novela.
A veces, sin que lo digan explícitamente sus autores, pero leyendo una buena novela, quiere uno hacer una novela también. Me ha ocurrido con Fuentes y La región más transparente , con Saramago y Ensayo sobre la ceguera, con Briceño Iragorry y El Regente Heredia, en fin, con muchos.
Pero entonces, nos encontramos con cuentos como el de "Funes el memorioso" del mismo Borges o "El perseguidor" de Cortázar, y vuelven las ganas de hacer relatos cortos. Así vamos.
En lo personal, no he escrito novela alguna; he escrito ensayos, que también me gustan. Sobre lo que preguntas Daniel, sí tengo algo en mente al estilo Briceño Iragorry en el género de la novela histórica. Ronda esa idea en mi cabeza desde hace meses, es cuestión de empezar.
Por cierto Daniel, el comentario que haces en respuesta a @madamebovary me hizo recordar un encuentro entre gente de distintas disciplinas (psicólogos, filósofos, periodistas, abogados) en torno a la obra de Borges. No recuerdo con qué cuento en particular, pero desde su óptica cada lector dio muy atinadas interpretaciones. Es que Borges es un genio que, a modo de un caleidoscopio, logra sintetizar el universo en lo que escribe.