La Luctuosa Penuria de los Venezolanos

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La calidad de vida de los venezolanos ha ido decayendo con el transcurrir de los años. Los ciudadanos carecen de los recursos y servicios esenciales para vivir dignamente, lo cual ocasiona un gran éxodo que afecta no sólo al sector productivo de la nación suramericana, sino también a los países de la región por constituir un desbalance en sus cifras migratorias.

Cada mañana los venezolanos llevan a cabo una cruzada en común: luchar contra el abatimiento y la resignación. La miseria y desesperación están presentes en los sectores populares, extendiéndose a todos los rincones del territorio nacional. El desequilibrio económico le propicia a diario golpes al bolsillo de los trabajadores, convirtiendo en añicos el poder adquisitivo de los mismos. La decadencia social se propaga como virus en los suburbios de las ciudades. El hambre corroe como ácido el estómago de las personas, aniquilando cualquier sueño de superación.

Por esa razón, son miles los que huyen despavoridos del país, sintiéndose asechados por el alarmante contexto que afrontan día a día. Bienaventurados aquéllos que gozan de las benevolencias brindadas por su nueva patria. No obstante, hay quienes caminan errantes lejos de sus fronteras. Podéis advertir sus sombras dispersas en las callejuelas, o apreciar sus deteriorados cuerpos reposando en las bancas de algún parque u, ocasionalmente, buscando cobijo bajo los estropeados tejados en los suburbios de alguna ciudad, ansiando refugiarse de la fría lluvia. Suelen haber sido personas que fueron arrastradas por la oleada de adversidades que acaece sobre ésta nación, obligándolos a partir en búsqueda de oportunidades, motivo por el cual , amargamente, corren el riesgo de ser apresados por la precariedad. ¿Quién sabe?, a lo mejor alguno de ellos podría ser acreedor de un honorable pasado y nosotros desconocerlo, y que, por cosas del azar, haya terminado en esa lamentable situación.

A pesar del delicado escenario socioeconómico, no todo lo que aflora son consecuencias negativas. La situación ha contribuido a la proliferación de organizaciones no gubernamentales, quienes llevan a cabo una admirable misión: prestar apoyo a quien más lo necesite.

"Venezuela siempre fue un país repleto de oportunidades, y a pesar de este mancha en nuestra historia republicana, nos servirá de impulso como sociedad y economía, así que tomemos esto de ejemplo para superarnos y darle cabida a nuestro ingenio, al resolver todas esos percances que enfrentemos diariamente".