A finales del año 2016 yo tenía bastantes interrogantes de cómo alterar mi condición de “esclavo” en el sistema económico tradicional que nos agobia a todos.
Mi esposa estaba embarazada y la mentalidad tradicional; lo pedagógico, lo cultural, y todo lo que está mentalidad acarrea me empujaba a la respuesta más común: la de buscar otro empleo para prepararme a solventar los gastos venideros.
En su lugar, renuncié a mi empleo; invertí un poco de capital en el mercado de las Criptomonedas y comencé a intercambiarlas para generar ganancias.
Hoy ya no tengo más interrogantes, el mercado de las Criptomonedas aumentó hasta en un 14,000% en algunas monedas que compré y gracias a mi atrevimiento de escaparme de el sistema que también me mantuvo esclavo; pensando en el circo político, en la farándula, en los deportes, en las películas nuevas y en el alcohol ( solo por mencionar lo más relevante), hoy tengo todo el tiempo del mundo para dedicarlo a mi hija y mi esposa.
Que le quiero decir?
Que en la palabrería s pierde también la esencia de la intención y la acción se muere.
Yo nunca he dejado en manos de nadie ni bienestar y el bienestar de los míos; ni a gobiernos, ni a deidades, todo lo he hecho yo para demostrar que si de verdad queremos, podemos.
He visto a miles de pájaros construir sus nidos por si mismos y nunca lo he visto pedir ayuda para hacerlo.
SI SE PUEDE!