Kimono

Hola estimados estimians! Esperando que sea de su agrado les dejo por acá mi nuevo post.

Un sueño particular es el de vivir por lo menos un año en Japón, este país posee una rica y milenaria cultura que abarca diversas manifestaciones desde lo tradicional hasta lo moderno, expresadas de diversa forma. Durante mi formación académica universitaria, tuve la oportunidad de aprender de su música y experimenté con la composición de una obra contemporánea para percusión, guitarra, flauta y voces femeninas a la que titulé Kabuki, en remembranza de un estilo del teatro japonés, de igual forma, llegue a conocer, aunque sinceramente muy poco, parte de sus técnicas compositivas musicales que aplique posteriormente en mis propias composiciones, pues como ya dije Japón y su cultura me parecen fascinantes.

La historia de Japón se encuentra presente en la cultura pop actual, el anime por ejemplo muestra brevemente manifestaciones históricas, religiosas y mitológicas propias de la cultura tradicional, como una forma de exportación y comercialización de la misma, así fue como conocí y aprendí sobre el arte pictórico japonés presente en toda la cultura pop y que ha servido de inspiración a artistas occidentales, como pintores, cineastas, músicos y diseñadores de moda.

Una manifestación japonesa de arte y forma de vida, es el kimono; que surge originalmente del textil kosode que entre los siglos XIII y XVI evolucionó en lo que conocemos hoy por hoy, y que a lo largo del tiempo llegó a convertirse en la prenda icono de la cultura japonesa, especialmente en cuanto a vestimenta femenina se refirió a partir del siglo XVII.

Esta indumentaria posee una amplia trayectoria relacionada no solo a lo social, artístico y político, sino con la aplicación de técnicas de teñido, bordado y tejido de telas, inspirados en la flora, fauna y mitologías del país, según cada estación del año y con nombres específicos para cada técnica y diseño; Nishiki para los tejidos coloridos y geométricos, Shibori para el teñido especifico con diseños sobrios y el Yuzen para el florido con representaciones de la fauna y flora.

Dada su confección, el kimono tradicional no es replicado en serie, puede ser considerado una obra de arte ya que un kimono no será nunca parecido a otro, de allí que muchos de ellos puedan costar pequeñas fortunas, y en otros casos su valor sea de carácter incalculable por su carácter simbólico bien sea histórico o familiar, así que independientemente de esto, el haber podido presenciar la belleza de una de estas prendas de forma directa y personal, fue una experiencia inolvidable de la que guarde un pequeño recuerdo, una fotografía sin flash por supuesto, de una de estas obras de arte, un kimono del siglo XVIII teñido y bordado a mano con la compleja técnica Yuzen, durante la semana cultural de Japón; y es que, vivir tiene sus regalos.

Mil gracias por leer, espero les haya parecido interesante.

Imagen tomada durante la semana cultural de Japón