Sentencia de Muerte (No es odio, es arrechera)

in #venezuela7 years ago

Todos los días muere gente, cierto. Gente carente de fama fallece, y sólo unos cuántos se enteran. Aunque siempre hay algo doloroso en la muerte, posiblemente por nuestro apego a otras personas, tenemos la capacidad de aceptarla cuándo se trata de causas naturales. Morir por enfermedad es otra cosa, pero siempre existe, se supone, la posibilidad de luchar contra esos males, y no rendirse. Existe, pero no aquí. No en este país.

En la patria bolivariana la enfermedad es una sentencia de muerte. El gobierno nos arrebató la posibilidad de luchar contra flagelos los cuáles, incluso, habían sido erradicados décadas atrás. Todo por culpa de una pandilla de maleantes que prefiere ponernos a comer mierda que reconocer que su sistema económico no funciona.

Pero no seamos benévolos: ellos saben lo que hacen. Han jodido tanto que se aferran al poder sólo para evitar el linchamiento. Millones de personas se alimentan diariamente de cambur y empanadas para sobrevivir sólo para no hurgar en la basura. Gente con mejores condiciones económicas reza para no padecer cáncer, pues, ellos también rinden su quincena y hacen la cola para comprar harina PAN.

Venezuela no necesita ningún canal humanitario. El gobierno no tiene por qué llevarse el crédito por acabar con la hambruna y la enfermedad luego de ser responsable de millones de desnutridos y pacientes terminales. Ellos no tienen por qué seguir teniendo el control de alimentos y medicinas que deberían pasar por las aduanas sin las trabas burocráticas y económicas impuestas por ellos mismos.

La inflación y la falta de producción también es responsabiidad del régimen, pues, en este último caso, el gobierno podría, por ejemplo, producir más harina de maíz que la Polar, pero no lo hacen porque son unos parásitos que sólo saben saquea, no producir. Culmino diciendo que conozco las leyes de este país, que se las consecuencias que pueden tener mis declaraciones, pero me defiendo con este argumento: a este gobierno no se le odia, se le tiene, como dicen en Venezuela para expresar un sentimiento más fuerte, ARRECHERA.