NUESTROS HIJOS LO VALEN!!!

in #vida6 years ago (edited)

Quiero saludar a toda la comunidad steemita y presentarme con este, mi primer post, por favor sean amables conmigo o al menos no tan rudos y estoy abierta a cualquier consejo o aporte que me quieran dejar en los comentarios.

Para empezar quiero hablarles un poquito a todas esas mamis que como yo se están dedicando a tiempo completo a sus hijos, ya que en la actualidad a las que tomamos esa difícil decisión nos sentimos juzgadas por aquellos que muchas veces no tienen idea de los sacrificios que hacemos por el bienestar de nuestros hijos, siento que no es justo, y que les parece cuando nos preguntan “y tu que haces? A que te dedicas?” y al responder que estas de ama de casa para cuidar a tos niños, su expresión cambia completamente como quien acaba de ver a un fantasma y sus ojos se tornan como dos huevos fritos. O como se le dice en mi país, como gallina que mira sal... me da mucha rabia, pero a veces no puedo evitar reírme porque. Sera que ellos piensan que no lo hemos pensado y repensado una y mil veces antes de tomar la decisión? Si supieran todo lo que pasa por nuestras mentes a diario.

En mi caso, soy madre de dos varones uno de diez años y otro de seis. Soy una madre joven y amo inmensamente a mis hijos, sin embargo siempre he trabajado, porque nunca quise ser el tipo de mujer que debe esperar a que su marido se digne a darle dinero para ella poder hacer algo. Durante cada embarazo tome un tiempo del trabajo para dedicarle a mis hijos ya que no los quise dejar en guarderías tan chiquitos, a los dos años de cada uno empezaron a ir a la escuela, lo que aquí llamamos (maternal). Y como soy de Venezuela cuando tuve a mi hijo menor las condiciones ya se estaban volviendo caóticas en nuestro país y era imperativo que trabajara cuanto antes, para ayudar con los ingresos en casa. Y así fue durante un tiempo, el trabajo que conseguí era de tiempo completo igual que el de mi esposo, incluso muchas veces salia mas tarde que el y no había problema con eso porque pagaban muy bien, prácticamente me volví el sostén del hogar porque mi salario era mayor al de mi esposo. Pero eso requería que los niños pasaran todo el día en la escuela, para lo que debían llevar en sus loncheras desayuno, merienda de la mañana, almuerzo, merienda de la tarde, y sus juguitos, era bastante. Eso era posible solo si se preparaba en la noche cuando llegaba del trabajo, lo que por supuesto no me daba tiempo de prestarle atención a mis hijos al llegar del trabajo, la cuestión era así: salir del trabajo a las 5pm, recoger a los niños de la escuela, llegar a casa, (directo a la cocina porque ya ellos venían con hambre y debía preparar la cena) mientras preparaba la cena (con el cansancio del día a cuestas) mi esposo ayudándome a torearlos para que se bañen, esta lista la cena, servir a los chamos y a mi esposo, mientras yo comía de pie en la cocina para ir preparando el almuerzo del día siguiente y hasta los desayunos para que a la mañana siguiente todo sea un poquito mas fácil y lograr salir a tiempo de casa. Mientras todo eso pasaba en la cocina todas las noches de lunes a jueves mis hijos y mi esposo por su cuenta cada quien en su cuarto pegados del tv, y al yo poder estar lista aproximadamente a las 10pm casi todos los días, corría a bañarme y ya todos en casa durmiendo. Tirarme en la cama a dormir para despertar al día siguiente a luchar con los niños para que despierten mientras mi esposo cocina lo que sea que yo haya preparado para el desayuno y prepara las loncheras con lo que deje listo para los 4. todos nos llevábamos una lonchera para pasar el día por fuera. Todos listos al fin a partir a la escuela y los trabajos, para a las 5pm repetir la historia.

Así pasaron cuatro años, durante ese tiempo muchas fueron las veces que nos citaron a la escuela para hablar de la situación de mi hijo mayor (Santi) bajo rendimiento, déficit de atención, etc etc etc. por lo que decidimos llevarlo con una psicopedagoga la cual le diagnostico dislexia. Para nosotros fue un duro golpe. Y para mi creo que lo fue mucho mas, me sentía MALA MADRE por no notarlo antes y poder ofrecerle apoyo y la dedicación que necesitaba, lo estaba dejando por su cuenta por todo este tiempo.

En el país la cosa fue recrudeciendo cada vez mas. Ya mi salario no alcanzaba para nada. Y el tener a los niños en la escuela todo el día costaba mas de lo que yo ganaba. Prácticamente estaba trabajando por hobby, porque con lo que ganaba no podía cubrir el costo del pago del tiempo extra en la escuela, era una locura. Era menos costoso quedarme en casa y cuidarlos en la tarde, eso sin contar el extra, de al fin TENER TIEMPO DE CALIDAD CON MIS HIJOS. Así que di el paso y renuncie a mi trabajo. Me siento muy bien por mi y por mis hijos.

Pero que baile que nunca falta el condenado pero... las cosas cada vez peores, solo mi esposo trabajando y me siento impotente cuando lo veo frustrado por la situación económica, gracias a Dios tengo el esposo que tengo. Que no se deja de nada ni nadie. Es el mejor padre y como decimos en Venezuela “echao pa lante” que no se queda quieto solo con el sueldo, de ser así no tendríamos comida en la nevera. Porque con un sueldo como los de ahora, sencillamente es imposible. Y son tantas las ideas de emprendimiento que tengo para ayudarlo, para ayudarnos. Pero cada una de ellas requiere capital para ponerlas en marcha, cosa que no tengo actualmente, pero sigo trabajando en ello. Y se que mas temprano que tarde lo lograremos.

Mientras tanto sigo llevando la situación con los niños y sobre todo con Santi un día a la vez, y cada vez que medito con respecto a la decisión que tome de dejar mi trabajo tengo mi recompensa cada vez que veo la mejora de Santi, en las felicitaciones que le dan en la escuela y que lo llenan de un orgullo inexplicable que hacen que el corazón se me ponga chiquitico. Me digo “si valió la pena y lo sigue valiendo. Ellos lo valen” y por esa razón puedo mandar al carajo a cualquiera que quiera venir a juzgarme por quedarme en casa a cuidar a mis hijos. A las mamas que trabajan y tienen familias perfectas, felicitaciones. A las que no son tan perfectas también las felicito. Y a nosotras las que tenemos una vida caoticamente hermosa nada perfecta y que a veces somos un desastre, mil felicidades también. Porque la cuestión no esta en no cometer errores, la cosa es aprender de ellos y ser cada día un poco mejor, por ellos y para ellos. Ya llegara el momento en que sean mayores y no necesiten de nosotras pero mientras llegue ese día yo estaré aquí cuando me necesiten...

saludos y espero escribirles pronto cuando tenga otro asunto para desahogarme._20190318_091609.JPG