Te vi en las luces de los escaparates.
Es tiempo triste
Cuantas veces cuidaron
Podrías sin ellos, sin las luces de la tarde,
Silueta negra sin sentido.
Todo a su alrededor es imposible y bezolaberno.
Caliente atrapa un beso.
Sombreando el óxido de blasfemia y alabanza.
Los sentimientos son ajenos a todos los cánones.
Barajadas descaradamente.
Taza borracha
Y cuanto vive su edad,
Juntos solo hasta el final.
Tu ganas - yo pierdo,
Como el hilo en la muñeca
Y como los gourmets con pequeños sorbos,
Milagros nuestro dios por placer.
Diciendo eso: "¡Junto a mí contigo!"?
Gente que
Jimmolund de sus pensamientos marianos.
Que el Espíritu nos consuele.